Las aguas vuelven a su cauce en Álava, aunque aumenta el desembalse
El sistema de embalses del río Zadorra seguía desaguando ayer a un ritmo de 60 metros cúbicos por segundo, una vez que su cauce lograra la capacidad de retener el caudal. Se podía acceder a todos los pueblos afectados en sus riberas en los municipios de Vitoria e Iruña de Oca, como Víllodas, Trespuentes o Margarita.
El aumento del volumen del desembalse (el miércoles por la tarde la cota estaba en 50 m3/s) fue tomada ante la normalidad que alcanzó el Zadorra por la ausencia de lluvia durante la jornada de ayer y en previsión al temporal de nieve previsto para el lunes que viene, con precipitaciones situadas entre 20 y 50 litros por metro cuadrado, según los pronósticos meteorológicos.
Mientras, el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, afirmó que aún se desconoce la causa de las riadas en los barrios de Rekalde y Peñascal y si influyeron en ellas las obras que se acometen de la Supersur, la nueva autovía en torno a la ciudad. La asociación de vecinos de Rekalde atribuyó las inundaciones a los movimientos de tierra y voladuras realizadas con motivo de dicha carretera y entendieron que estas actuaciones han convertido el barrio "en un embudo".
En Getxo, otro municipio donde el agua causó destrozos, el alcalde, el peneuvista Imanol Landa, anunció que el Ayuntamiento abrirá una línea de ayudas para los vecinos cuyos inmuebles sufrieron daños. El fondo es el mismo que el habilitado con motivo de las graves inundaciones de junio pasado, que hasta ahora ha supuesto la concesión de 385.000 euros. La alcaldesa de Basauri, la socialista Loly de Juan, defendió la reforma de dos puentes del municipio para reducir los riesgos de riadas.
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