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Patxi López promete que su primera medida será un plan contra la crisis

Los socialistas presentan sus listas completas convencidos de su victoria

Los socialistas se muestran más convencidos que nunca de que el cambio en Euskadi es posible en las elecciones del 1 de marzo. El Palacio Euskalduna de Bilbao acogió ayer la presentación de sus 75 candidatos al Parlamento con una única intervención, la de su secretario general y aspirante a lehendakari, Patxi López, quien anunció que su primer objetivo de gobierno será afrontar la crisis. A su voluntad de hacer contrapuso que el candidato del PNV, el lehendakari Ibarretxe, convocara elecciones diciendo que está "todo hecho". López anunció que si gobierna aprobará en las primeras semanas de su mandato un "verdadero plan de choque por el empleo y contra la crisis económica".

Sus propuestas, que ya adelantó parcialmente en pasados actos sectoriales con empresarios y jóvenes, pasan por el diálogo social y la recuperación del tejido industrial.

El PSE quiere ir desgranado progresivamente sus iniciativas en el mes y medio previo a la cita en las urnas. Sus propuestas pasan, en sus palabras, porque la crisis "no la paguen los más débiles y nadie se quede desenganchado del carro del bienestar y del progreso en este país".

Entre fuertes aplausos, López fue nombrando uno a uno a los 25 candidatos de cada territorio. Hizo una alabanza global a su equipo, pero dedicó frases especiales a parlamentarios con solera como Jesús Loza, Isabel Celaá, José Luis Anda, Rodolfo Ares o Gema Zabaleta, entre otros. El primero en subir al escenario fue el presidente del Senado, Javier Rojo, quien cierra la lista por Álava. Tampoco olvidó mencionar a todas las víctimas que los asesinos de ETA han dejado en las filas del socialismo vasco.

El mensaje de cambio que los socialistas promulgan quiere profundizar en el autogobierno y se inspira en su lema de esta precampaña: "Punto de encuentro". López abogó por el diálogo "de verdad" y la unidad entre diferentes, el fin de la pugna identitaria y la confianza frente al miedo y la convivencia. Apeló el dirigente socialista a la historia de Euskadi ligada a la de su partido, con nombres como los de Indalecio Prieto o Ramón Rubial, pero también a la del PNV, citando a José Antonio Aguirre o Juan de Ajuriaguerra.

López aseguró que su formación representa la pluralidad y que su Gobierno no se perderá en debates "estériles" y sacará adelante en su primer año leyes como la Municipal o de Vivienda, que el actual Ejecutivo ha sido "incapaz" de impulsar.

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Candidatos y euskera

Hace algo más de 10 años, Juan José Ibarretxe se presentó a las elecciones bajo la sospecha de no saber euskera. En los mítines se fue descubriendo la eficacia de sus clases particulares. Patxi López parece que quiere repetir igual estrategia. En cada mitin se le ve más suelto y usa el euskera un poco más. Viejos euskaldunes socialistas se sorprenden y comentan en voz baja: "Y pronuncia bien".

El euskera parece ser una de las bazas en una campaña muy presidencialista. López entra en el auditorio tras anunciarse su nombre. Con música de fondo, besa, abraza y saluda hasta llegar a su sitio en primera fila. Los socialistas mezclan el aurresku en sombras chinescas con la danza y vuelven a romper en aplausos cuando el candidato, único orador, sube a la tribuna. López cierra el acto como "un humilde socialista vasco".

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