¿Qué deberían hacer los palestinos?

Sí, señor Zapatero. Hamás ha elegido el camino equivocado al reanudar el lanzamiento de cohetes contra Israel al final de la tregua. ¿Sabe que el respeto del Tsahal de la tregua incluyó matar a seis milicianos en el interior de la franja de Gaza el 5 de noviembre?

¿Sabe que durante la tregua siguieron muriendo civiles a los que no se permitió cruzar a Israel a recibir tratamiento médico "por motivos de seguridad"? Los que llevamos años manifestándonos por el fin del bloqueo sí lo sabemos...

¿Qué sugiere usted que deberían haber hecho los palestinos? ¿Reconocer a un Estado de Israel abstracto y sin fronteras definidas? Yasir Arafat lo hizo en 1988, y obtuvo cuatro años después como contrapartida el cerco y asalto a Ramala, Jenín, Tulkarem, Hebrón, Belén, Nablús...

¿Detener el lanzamiento de cohetes? No parece que la ausencia de éstos en Cisjordania haya evitado la proliferación de los asentamientos israelíes y la humillación de los checkpoints, algunos de ellos emplazados en zonas bajo supuesto control de la ANP, sin que ningún país se moleste en recordar a Israel que suponen violaciones de las Convenciones de Ginebra. ¿Recurrir a los mecanismos que proporciona la legalidad internacional?

El 9 de julio de 2000, el Tribunal de La Haya declaró ilegal el trazado del muro del apartheid y desde entonces tanto Israel como la vergonzante "comunidad internacional" han hecho oídos sordos a dicha sentencia.

Israel ni siquiera permitió (por supuesto, por motivos de seguridad), en agosto del 2007, la celebración del partido Palestina-Singapur de clasificación para la Copa del Mundo en Suráfrica.

Parece que la mayor aspiración que se le permite a un palestino es entrar en un autobús o un café israelí, saltar por los aires y acabar de una vez por todas, causando el mayor daño posible. Cuando alguno lo haga, señor presidente, por favor, no ponga cara de sorpresa y, sobre todo, no se atreva a dar lecciones de moralidad.