El campo de hace un siglo

Artículos. Su nombre aparece en las abigarradas y desbarajustadas memorias de Baroja, Cansinos, y otros dejaron constancia de su paso -ruidoso- por el Madrid finisecular, con su golfemia y noctívagos. Era cántabro y se fue a las Américas, a Paraguay, y se fue a hacerlas, las Américas; vivió poco, abrazado a la justicia social, enfebrecido de anarquismo. Como escritor tuvo poca suerte en vida, aunque el joven (anarquista) Borges lo buscó como maestro, como lo fue para Augusto Roa Bastos, ese pequeño y corajudo escritor paraguayo que puso en el mapa a su país, aunque tuviera que vivir en el exilio. Aquí se han publicado algunas cosas suyas -pocas-; hace un año Gregorio Morán publicó una rareza, una curiosidad, Asombro y búsqueda de Rafael Barrett, que ahora Francisco Corral, el autor de esta edición, que da pie a esta nota, descalifica -un tanto insólitamente a mi modo de ver-, como por otra parte Morán, en su texto, descalifica los trabajos de Corral. La mala suerte, pues, acompaña a este Barrett, escritor y hombre ardoroso, que tuvo una vida tras de sí, que no cabe resumir en pocas líneas. Empleemos las que restan en comentar esta interesante antología: los artículos sobre el campesinado paraguayo de principios del XX son una apasionada soflama espléndidamente escrita. Tiene tal sonoridad esa prosa incendiaria, llena de indignación y datos concretos, que bien podría -así lo he hecho- leerse en voz alta, en total soledad, desde luego. Barrett, agitador social, escritor de fuste, en voz alta: "¡Pluma mía, no tiembles, clávate hasta el mango!". Más doctrinal es el ensayo siguiente, 'La cuestión social', en la que Barrett, desde su profunda convicción libertaria, se ocupa del trabajador de su país de adopción, un país en el que encontró el mundo que buscaba y que amó con la pasión que le debía poner a todos los inconvenientes de la vida. "El porvenir dirá", escribe, o confía. El tercer texto, 'De estética', trata de cuestiones literarias y artísticas interesantes de conocer ahora, pero acaso un tanto oxidadas por el tiempo. En fin, un libro éste raro y curioso, una primera aproximación, rara y curiosa, a Rafael Barrett, y para esta aproximación necesitamos aunar esfuerzos, los de Corral y los de Morán. Mejor sumar que restar. -