El cuento de la cuneta

"Las últimas fosas comunes abiertas en Europa no son las de Srebrenica o Kosovo. Se realizaron en el extremo más occidental del continente europeo, un lugar donde no hubo guerra civil, sólo represión". Para Manuel Abad, director de Flores tristes (Pórtico, Formateo y TVG) , que se estrena el viernes en el Teatro Rosalía de A Coruña, el silencio en Galicia "duró 70 años". "Es hora de contarlo".

Abad quiso hacerlo en un documental histórico de creación dividido en 16 capítulos, sucedidos entre estampas de Castelao (Atila en Galicia y Galicia Mártir). "Lo intenté abarcar todo", dice Abad. Empezando por el Alzamiento y terminando por la educación, los campos de concentración y el papel de la Iglesia. Para ello mezcló testimonios reales y trabajo actoral. Un total de 26 personas con una historia verdadera hablan desde el lugar de los hechos con una flor de malva en la mano, ensangrentada mediante animación 3D.

Junto a anarquistas y comunistas anónimos aparecen Choncha Comesaña, la mujer que inspiró O lapis do carpinteiro, la novela de Manuel Rivas, Xosé Manuel Sarille -que introduce su propia historia familiar en Polos fillos dos fillos-, Isaac Díaz Pardo o Concha Nogueira, hija del matrimonio muerto en la tragedia del bou Eva, en 1937, cuando nueve republicanos decidieron suicidarse tras ser delatados. Entre los testimonios más emocionantes, Abad destaca el de Arturo Pérez, hijo del alcalde de Gomesende. "Es de los que tuvo que desenterrar al padre por su propia cuenta". La reconstrucción histórica que apoya los relatos -contaron con la asesoría de Emilio Grandío, el proyecto As vítimas, os nomes, as voces e os lugares- se completa con grabaciones de las primeras fosas abiertas en Galicia y lugares emblemáticos de la represión, desde el Porto do Berbés al Furriolo, incluyendo imágenes del juicio al historiador Dionisio Pereira, denunciado por la familia de un ex alcalde falangista. Entre el material inédito, imágenes de una visita de Franco a A Coruña en 1942. "Es increíble, un documental italiano traducido al inglés, pero parecen planos de Eisenstein porque los operadores eran alemanes. El retrato de Franco se reproduce en las corredoiras". De Carlos Blanco a Manuel Lourenzo, 16 actores completan la dramaturgia leyendo causas militares. A Abad no le preocupa que esta clase de distanciamiento pueda derivar en lección de historia. "Sí es cierto que a veces sentía lo del fotógrafo en África: qué hacer con el niño, fotografiarlo o darle de comer".

Abad, que debutó en 1974, director de Luar, piensa ahora en términos de exhibición y distribución, de la que se habrá de encargar Tic-Tac Producciones. "Estamos desarrollando la infraestructura", dice. Aún recuerda cuando participó, a comienzos de los años 90, en el lanzamiento de la Escola de Imaxe e Son de A Coruña. "En Madrid no hacían más que preguntarnos si aquí había industria audiovisual suficiente para montar una escuela. Evidentemente, mentimos".