Vigo acusa a Vivenda de alterar su plan de ordenación

Un exhaustivo informe de los cuatro principales responsables técnicos del urbanismo vigués desacredita, hasta declararlo innecesario en la ciudad, el Plan Sectorial Galego de suelo residencial, promovido por la Consellería de Vivenda. El informe, que fue presentado ayer en la sesión de la Xerencia de Urbanismo para documentar a los grupos municipales con vistas a posibles alegaciones, concluye que las actuaciones del plan sectorial de Vivenda podrían ser desarrolladas en el marco del plan general de urbanismo, que, sin embargo, resulta sensiblemente afectado en sus previsiones por las que marca Vivenda, de superior rango jerárquico.

El plan de Vivenda, que prevé la construcción durante los próximos 10 años de 6.759 viviendas de protección en nueve ámbitos delimitados por el plan general de urbanismo de Vigo, podría invadir competencias municipales, según el informe técnico, al alterar usos e intensidades del plan general, que consecuentemente tendría que ser modificado. Esta modificación afecta "a la programación y a la estrategia de implantación de las infraestructuras necesarias para las actuaciones previstas", sin garantizar, a diferencia del plan general, la coordinación de los elementos fundamentales de los sistemas generales, como se establece por ley.

El plan general de Vigo, según los técnicos, tiene holgura suficiente para, con su simple ejecución sin modificaciones, alcanzar los mismos objetivos del plan sectorial. Las nueve actuaciones que éste plantea en Vigo, sin embargo, aunque se refieren a ámbitos delimitados en el plan general, "no respeta los parámetros de intensidad de uso, aprovechamiento, tipologías edificatorias, alturas y criterios de ordenación, introducen usos no residenciales, modifican las reservas de zonas verdes, equipamientos y el porcentaje de viviendas de protección, y alteran el equilibrio económico de beneficios y cargas entre áreas de reparto del plan general", señala el informe.

El sistema de gestión previsto en el plan de Vivenda (expropiación, con utilización preferente de mecanismos de mutuo acuerdo y permutas con pago en especie) "no garantiza suficientemente la viabilidad de la ejecución, que no cuenta con la previsión económica de fondos suficientes", añaden los técnicos. Además, al patrimonializar Vivenda el 100% del aprovechamiento, "podría provocar una pérdida de 66,3 millones de euros", según los datos del plan general, en la previsión de ingresos en las arcas municipales, destinados en sus dos mitades a la protección de viviendas y a la ejecución de infraestructuras.

La alteración de la programación temporal del plan general, ya que el programa de la consellería retrasa al segundo quinquenio actuaciones previstas en el plan general para el primer cuatrienio, "afectará a las conexiones y servicios de otros ámbitos necesitados de elementos fundamentales de la estructural general y orgánica del territorio".

El informe de sostenibilidad ambiental, por otra parte, dicen los técnicos locales, obvia concretar los efectos de las actuaciones en las que se incrementa la edificabilidad, no estudia el paisaje ni la relación con el planeamiento urbanístico vigente, ni contiene indicadores de seguimiento de la sostenibilidad. El informe de los técnicos municipales aporta argumentos a las alegaciones al plan de Vivenda que seguramente presente el grupo socialista en función del plan general, que el alcalde, el socialista Abel Caballero, defiende sin fisuras. "Ahora parece que el problema es que se quiere construir vivienda protegida en Vigo", declaró el teniente de alcalde, Santiago Domínguez, quien adelantó que el BNG no presentará alegaciones contra el plan de la consellería nacionalista.