La recesión llega al firmamento

Nadie cobra como Will Smith. Entre 15 y 20 millones de dólares (de 11,2 a 15 millones de euros) por película. Y entre las actrices, Angelina Jolie es la mejor pagada, con un salario que está entre los 7,4 y los 11,2 millones de euros. Ésa es la cotización de este año según la revista The Hollywood reporter. Pero por mucho que parezca, no es tanto comparado con los viejos tiempos. Por ejemplo, los 33,7 millones de euros que Tom Cruise llegó a cobrar tras el estreno de Misión: imposible en 1996. O los casi 18 millones de euros que cobró Jim Carrey con Un loco a domicilio ese mismo año.

En la actualidad la última comedia de Carrey, Di que sí, fue posible después de que el actor abandonó sus peticiones crematísticas estratosféricas conformándose con un sueldo también millonario pero que recibirá cuando la película recupere en taquilla su presupuesto (27,7 millones). A partir de ese momento Carrey se llevará un 33% de todos los beneficios del filme, incluidos los ingresos por su venta en DVD.

Los cambios salariales en Hollywood reflejan varios factores: la actual crisis económica en todos los sectores, el estancamiento del mercado del DVD y una cartelera en la que vende más un concepto o un superhéroe del mundo del cómic -lo interprete quien lo interprete- que una estrella.

Angelina Jolie no debe echarse a llorar. Todavía. La actriz más popular de la pantalla, por encima de Julia Roberts, tiene una abultada cartera de proyectos. Está la continuación de Wanted, por la que se embolsaría 11,2 millones. Y Edwin A. Salt, que interpretará por 7,4 millones de entrada y un buen porcentaje de los beneficios posteriores, y eso que heredó un papel creado inicialmente para Tom Cruise.

El sueldo de Jolie está en la media de algunos de los intérpretes más conocidos de la pantalla, entre ellos su pareja Brad Pitt o Johnny Depp. Según la misma publicación, Julia Roberts se mantiene entre las tres mejor pagadas del año. A pesar de su larga ausencia de las pantallas su regreso con Duplicity viene acompañado de un cheque de 8,2 millones. Y Reese Witherspoon está en los 6,7 millones con su última comedia, Como en casa en ningún sitio. Nombres populares en otros años como Nicole Kidman o Halle Berry han desaparecido de las 10 primeras posiciones de esta lista de actrices millonarias. Incluso Cameron Díaz, que solía cobrar del orden de los 7,4 millones ha visto su sueldo reducido a 5 millones.