La oposición critica la política de "parches" para combatir el paro

En lo único en que coincidieron ayer los tres grupos del Parlamento y el Gobierno de Andalucía la situación del desempleo en la comunidad fue en un dato estadístico: hoy en día hay 707.000 andaluces en paro. Pero a partir de ahí, discreparon en las medidas que se debe adoptar y en las causas de la situación. El debate general celebrado en la Cámara, con casi todo el Ejecutivo presente en sus escaños, empezado por el presidente Manuel Chaves, arrojó pocas coincidencias en el análisis.

Para la oposición, las medidas aplicadas por los socialistas en el último año son sólo "parches", "chapuzas" e "improvisaciones", mientras que para el consejero de Empleo, Antonio Fernández, y el portavoz socialista, Manuel Gracia, son medidas anticíclicas que persiguen a través de incentivos y políticas activas que el menor número de personas se queden sin un puesto de trabajo.

"Han bajado la tasa de paro en tres puntos en 26 años, ¡enhorabuena!"

Fernández reconoció que nadie tiene respuestas escritas para afrontar una crisis que destroza empleo en todo el mundo y repasó las iniciativas puestas en marcha por el Gobierno andaluz para atajar la sangría. Entre ellas, las ayudas a la contratación de parados por parte de entidades sin ánimo de lucro, ayuntamientos, diputaciones y mancomunidades (bautizado como el plan Menta) o el plan complementario por 360 millones de euros para obras urgentes en los municipios. Según Fernández, el "intenso" crecimiento del paro registrado en Andalucía en el último año se debe, sobre todo, a la incorporación de personas al mercado de trabajo. "El 63% de los 240.000 parados de los últimos doce meses corresponde a nuevas incorporaciones y esto supone que para reducir el paro en un sólo puesto de trabajo se deben generar 152.000 empleos", subrayó. Reprochó a PP e IU que algunos de sus ayuntamientos no han presentado solicitudes para la contratación de parados.

Como ya viene siendo habitual desde el comienzo de la legislatura, el líder del PP, Javier Arenas, defendió la posición de su grupo ante lo que consideró un "debate importante". También aprovechó para retar a Chaves a subir la tribuna y recordarle tanto al presidente como al vicepresidente económico, José Antonio Griñán, que hubo huelgas generales cuando ambos ocupaban el Ministerio de Trabajo, mientras que con él como ministro la tasa de paro se redujo a la mitad.

Como suele ser habitual en Arenas dio brochazos gordos sobre la situación, para recalar en el mensaje que repite invariablemente desde que regresó a la política andaluza: los socialistas han dilapidado las ilusiones de hace 30 años y las han convertido en frustraciones, los cambios son tan lentos que apenas se notan y las mejoras parecen propias de África.

"Han bajado la tasa de paro en tres puntos en 26 años, ¡enhorabuena, enhorabuena!", ironizó, para subrayar que al comienzo de la autonomía el paro era del 21% y ahora asciende al 18%. Como ya se sabe, Arenas y Chaves se hacen un marcaje diario de lo que dicen. Y ayer, el popular debió sentirse aludido por unas declaraciones del socialista horas antes en la entrega de unos premios. "A cada uno se le termina midiendo por sus éxitos y sus fracasos", razonó Chaves. "El fracaso de una gestión se mide por el número de desempleados y el éxito, por los empleos que se crean", replicó Arenas.

Horas antes, en Córdoba, el secretario general de UGT en Andalucía, Manuel Pastrana, sostuvo que no descartaba ninguna medida de presión, incluida la huelga general, si persistía el incremento del paro. "Si el crecimiento del desempleo continúa a pesar de la aplicación de todas las medidas anunciadas y comprometidas al ritmo que va, nosotros actuaremos en términos de movilización proporcionalmente a esa evolución".