Algunos males del sistema educativo
Enhorabuena por el artículo de Ricardo Moreno Castillo del pasado día 4. Suscribo todo lo que este profesor dice y denuncia, y, además, añado algunas perlas más. En efecto, la LOGSE y sus sucesivos retoques, más o menos anuales, han convertido la inteligencia y la formación de los jóvenes españoles en un erial tal que no atino a ver cómo se podrá escapar de él. Se ha llenado tanto la ESO como el agonizante bachillerato con un conjunto de asignaturas folclóricas de una o dos horas semanales en las cuales es imaginable lo que se puede hacer: la nada absoluta. Además, motivados por no sé qué sentido de la libertad, nuestros legisladores nos han inoculado el virus de la optatividad y más que un centro de enseñanza, nuestros institutos parecen restaurantes a la carta. Eso sí, podemos encontrarnos con optativas de cuatro horas a la semana. Pero hay una asignatura más maligna aún, la denominada Estudio asistido o alternativa a la Religión católica u otras religiones. Consiste la tal materia en aguantar a un grupete de 30-35 alumnos que no quiere estudiar y menos ser "asistido". Y todo por la falta de valor de los gobiernos de turno para coger el toro por los cuernos, es decir, para no obligar a nadie a tener que hacer otra cosa cuando otros quieran ir a Religión. Por mí, no tendría inconveniente hasta en ponerles misa o ritos animistas, si así gustan, pero lo que es intolerable es que se hipoteque el tiempo de los otros alumnos creándoles tiempos vacíos. Súmesele a esto el promocionar con tres o dos asignaturas pendientes ¡o por imperativo legal!, es decir, con las que sean, porque ya no puede repetir más.
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