TVG es la segunda autonómica que más dinero público recibe por habitante

El informe del comité de expertos encargado de hacer propuestas para la reforma de la Compañía de Radio Televisión de Galicia (CRTVG) refleja que las pérdidas y el déficit de la compañía no han parado de crecer durante los últimos tres años. Y eso a pesar de la contención de los gastos financieros derivados de las operaciones de saneamiento de la deuda y del creciente volumen de subvenciones públicas que TVG y Radio Galega siguen recibiendo de las arcas de la comunidad autónoma.

Los ingresos por ventas y producción han ido aumentando entre 2006 y 2008, pero lo han hecho muy por debajo de las compras, lo que ha causado un incremento de las pérdidas. Si en 2006 CRTVG perdió 91,2 millones de euros, este año la previsión alcanza 103,8 millones (un 13,8% más).

La Xunta aporta casi el 80% del dinero que gasta Televisión de Galicia

A partir de ese dato, los expertos consideran "plenamente justificado" que los presupuestos públicos "se constituyan en fuente principal de financiación de la televisión pública". De ese modo la futura corporación dispondría de "un horizonte financiero a largo plazo" y de "viabilidad económica".

Estas cifras no impiden a los expertos concluir que TVG ha conseguido en los últimos años "una notable mejora financiera" gracias a un "proceso de saneamiento y racionalización" mediante el incremento de los recursos propios y el aumento en la estabilidad del endeudamiento.

CRTVG es, con la única excepción de Telemadrid, el ente público autonómico que menos dinero recibe en términos absolutos de los Presupuestos (111 millones). No obstante, sus bajos ingresos la convierten en la televisión autonómica que más dinero recibe en proporción a su presupuesto total (casi el 80%). Sólo la televisión vasca, que tiene en funcionamiento dos canales, recibe más dinero de las arcas públicas por habitante.

Los ingresos por publicidad indican el grado de audiencia y la aprobación por parte de los anunciantes, del mismo modo que la venta de programas puede asociarse al concepto de calidad. Si aceptamos ambos criterios, citados en el informe, TVG es la peor televisión pública española, con unos ingresos por publicidad y ventas en 2007 de sólo 20 millones de euros (apenas un 16% de la dotación presupuestaria de la Compañía).

Según datos de la Federación de Organismos de Radio y Televisión Autonómicos (FORTA) citados por los expertos, TVG sólo es capaz de generar 7 euros por habitante a través de publicidad y venta de programas, la peor cifra de las seis televisiones autonómicas de España. En el otro extremo se sitúa la Televisión de Cataluña, con 22 euros por habitante, el triple que Televisión de Galicia.

Si se fija la atención exclusivamente en los anuncios, la situación no mejora: Televisión de Galicia generó apenas 6 euros por habitante en 2007 (antes de la crisis) frente a los 20 que sumó la emisora pública catalana.

Del análisis de los costes operativos, el comité de expertos admite que CRTVG es la organización de medios públicos autonómicos que menos cuesta en cifras absolutas. Este reconocimiento, sin embargo, "pierde buena parte de su significado" si se tiene en cuenta que ese coste (115 millones en 2007) representa cinco veces más que los ingresos generados, la peor proporción de toda España (nuevamente la televisión de Cataluña ocupa el puesto más favorable).

En cifras por habitante el coste de TVG y Radio Galega (41 euros) se sitúa muy cerca de la media (43 euros), pero si se tiene en cuenta la relación con los ingresos, la radio y la televisión gallegas vuelven al último lugar de la tabla. Los expertos reconocen "diferencias muy pronunciadas" con las demás emisoras autonómicas aún teniendo en cuenta las peculiaridades derivadas de los costes asimilados a la identidad lingüística y a la capacidad adquisitiva de la población.

Por lo que se refiere a los gastos de personal, las cifras manejadas por el comité de expertos sitúan los de CRTVG en el último lugar en cifras absolutas, aunque se acercan a la media tanto en proporción al presupuesto total como a la población gallega.

Pese a estas cifras, el informe destaca que Cataluña y el País Vasco gastan más en sus respectivas televisiones en proporción al PIB y subrayan, el efecto arrastre de TVG "sobre los consumos intermedios del resto de la economía" y la "generación de empleos indirectos". El hecho de que CRTVG preste un servicio público, razonan los expertos, debería evitar que se utilicen "lógicas estrictamente privadas para enjuiciar su actuación".

A la vista de estas cuentas, el informe del comité de expertos recomienda que la nueva Corporación RTVG, tal y como ya sucede con la de Radiotelevisión Española, se somete a un contrato-programa que garantice la adecuada disciplina económica y financiera.

La propuesta, siguiendo también el modelo estatal, pasa por convertir el ente público CRTVG en una sociedad mercantil de carácter público. Esta transformación liberaría a la nueva corporación "de las limitaciones propias de un ente sometido al derecho público" y la dotaría de un "mayor grado de flexibilidad en su funcionamiento ordinario".

Ese cambio, razonan los expertos, es imprescindible para actuar en un mercado que es cada vez más se caracteriza por el incremento en el número de operadores y un elevado grado de competitividad.

Del mismo modo, la encomienda de gestión directa del servicio público a una sociedad mercantil permitiría someter a sus gestores y administradores "al mismo nivel de responsabilidad" que adquieren los de las demás sociedades mercantiles.