El rostro del jefe más despiadado de ETA
La imagen de un melenudo Txeroki, repartida en carteles de la policía por media España, tenía poco que ver con la del etarra que fue capturado el lunes en Francia. Según el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, el número uno de ETA estaba obsesionado con la seguridad. Por eso, entre los efectos que se le incautaron había pelucas. Y por eso ahora iba casi rapado, como aparece en la imagen, tomada tras su detención en la madrugada del pasado martes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Declaraciones prensa
- Detención terroristas
- Alfredo Pérez Rubalcaba
- Garikoitz Azpiazu "Txeroki"
- IX Legislatura España
- Ministerio del Interior
- Operaciones antiterroristas
- Ministerios
- Legislaturas políticas
- Política antiterrorista
- PSOE
- ETA
- Lucha antiterrorista
- Gobierno
- Gente
- España
- Partidos políticos
- Administración Estado
- Grupos terroristas
- Terrorismo
- Política
- Administración pública
- Sociedad