Pequeños experimentos
Como la mayor parte de los cineastas, el estadounidense David Lynch también arrancó a jugar con la cámara y a experimentar con cortometrajes antes de rodar su primer largo, Cabeza borradora, en 1977. En el prólogo de su carrera, un cóctel inimitable de experimentación y atracción por lo popular, en 1966, a sus 20 años, Lynch debutó con Six men getting sick, un corto de animación en el que se ven seis cabezas ardiendo y vomitando en cadena mientras se escucha una sirena. Dos años después sigue con la animación, en The alphabet, la reconstrucción de una pesadilla. Lynch necesitó 24 meses más para su tercer trabajo, The grandmother, con un sonido pertubador marca de la casa. Su salto a la dirección con actores llegó con The amputee (1974), en el que una mujer sin piernas escribe una carta mientras un enfermero (Lynch) le venda los muñones. Todos estos filmes están en el DVD The short films of David Lynch (cortometrajes), que de propina -junto a comentarios del realizador- añade dos piezas, una de 1988 y otra de 1995, frutos de dos encargos.
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