Enterrados al grito de "héroes" los autores del atentado de Bali
Los tres militantes islamistas fueron ejecutados de un tiro en el corazón
Los tres islamistas indonesios condenados por el atentado contra la discoteca Kuta Beach de Bali, en 2002, fueron enterrados ayer por sus familias en unas ceremonias a las que acudieron miles de simpatizantes, que les calificaban de "héroes" y gritaban "Alá es grande". A pesar de los temores de que los más radicales aprovecharían la circunstancia, los funerales se desarrollaron de forma pacífica con incidentes menores con policías y periodistas.
Imam Samudra, de 38 años; Mukhlas, de 48, y Amrozi, de 46, pertenecían a Yemaa Islamiya, grupo al que Occidente vincula a Al Qaeda. Fueron ejecutados por un pelotón de fusilamiento en la isla de Nusakambangan. Jasman Pandjaitan, portavoz del fiscal general de Indonesia, explicó que pidieron que no se les vendara los ojos y que se disparó una bala al corazón por cada condenado.
El atentado de Bali cometido el 12 de octubre de 2002 causó la muerte a 202 personas, entre ellas 88 australianos y 38 indonesios. En una entrevista hace un año, los islamistas mostraron arrepentimiento por la muerte de musulmanes, no por el atentado.
La Yemaa Islamiya dijo que su objetivo era desalentar las visitas de los extranjeros para convertir Indonesia, que es el país musulmán más poblado del mundo, en parte de un gran califato.
"La gente debe permanecer vigilante ya que puede haber alguien que responda a la muerte de los tres hombres. No deberíamos creer que esta respuesta será automática por parte de alguna de las células activas", aseguró ayer Sidney Jones, experto en terrorismo del International Crisis Group con sede en Bruselas.
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