"Nos han faltado los detallitos"
Schuster niega la evidencia mientras la plantilla se muestra decepcionada
Saviola lo resumió en una frase: "Estamos muy mal". La atmósfera en el vestuario del Madrid se va tornando cada día más irrespirable. La derrota de ayer ante el Juventus agrava las cosas. Los jugadores salieron del campo desolados, admitiendo abiertamente que algo se ha roto en el equipo que ganó las dos últimas Ligas. En las gradas tampoco ven mejor las cosas. La gente comienza a inquietarse ante lo que apunta a convertirse en el tercer fracaso consecutivo en la Liga de Campeones del proyecto de Ramón Calderón. Un grupo de unas 300 personas se agolparon fuera del estadio, en la puerta del palco del Bernabéu, a increpar a los directivos.
Guti no suele hablar después de los partidos. Pero cuando lo hace es un libro abierto. El segundo capitán madridista dice lo que piensa. Claramente. Extraño en un negocio en el que prevalecen los eufemismos. Ayer lanzó un latigazo: "No tiene que sorprendernos que la Juve llegue tres veces al área y marque dos goles; lo que no tiene que sorprender es que nosotros no hemos estado a la altura en un partido importante ante un rival complicado. El resultado nos delata. No hemos jugado bien. Falta calidad".
"No estuvimos a la altura; el resultado nos delata. Falta calidad", afirmó Guti
"Tácticamente hemos estado estupendos", recalcó el técnico alemán
Además de decir que la plantilla no tenía todo lo que debía tener, cosa que luego matizó, Guti apuntó a un problema de cohesión espiritual. La unión del grupo se resquebraja. Fue la primera vez que un jugador del Madrid dice cosas como éstas en los últimos tres años. "Tenemos que intentar ser un equipo dentro y fuera del campo". "La Juventus tampoco es un equipo al que sea fácil jugarle bien", comentó Guti. "Tendríamos que haber sido más serios y más contundentes atrás y, a partir de ahí, dar más aire a nuestro juego y abrirnos a la bandas e intentar llegar a portería. No hemos sabido leer el partido. Todos sabíamos como juegan: igual en casa que fuera, no les preocupa el resultado sino estar bien atrás e intentar tener alguna ocasión de gol. El problema de este equipo es que cuando se te adelanta es difícil jugarle. No hemos sabido mantener el balón y estar tranquilos. Nos hemos ido precipitando y, cuando se pierde el balón con este equipo pues lo normal es que pierdas".
Sobre el segundo gol, Guti culpó a medias a la barrera y a Casillas. "Es una colocación que intentamos hacer en los últimos días", dijo, en referencia a que habían estado entrenándose para contrarrestar las faltas lanzadas por Del Piero. "Parecía que estaba todo claro, pero al final no ha salido así. Tampoco ha sido un lanzamiento lo suficientemente bueno como para que entrara. Entró un poco por el despiste de la barrera y un poco por el despiste de Iker".
Si sus jugadores se mostraron francamente decepcionados, a Schuster todo le pareció correcto. Llega un momento en la vida de los entrenadores en que, o bien se apartan de la realidad, o bien son conscientes de lo que ocurre pero mienten con descaro en la creencia de que cualquier cosa es mejor antes que revelar públicamente una verdad amarga. Berd Schuster se encuentra en una de estas dos situaciones. No se sabe cuál. Pero el técnico del Madrid, ese hombre que antes se ponía rabioso con las derrotas de su equipo, ahora parece estar bajo los efectos de un sedante. Últimamente el Madrid atraviesa el peor momento desde que el alemán llegó al cargo. Sin embargo, Schuster da la impresión de haberse tomado las cosas con una serenidad fantasiosa. Ya no se ve molesto. Al contrario. Dice que está satisfecho. Que la plantilla está compensada y que, contra el Juventus, el juego fue estupendo. Como dijo él mismo: "Sólo nos faltaron los detallitos".
"No hay que buscar cosas raras", declaró Schuster cuando le preguntaron por el desequilibrio táctico de su equipo, cada día más flaco en el medio campo. "Si hemos creado tantas ocasiones a un equipo como la Juve, que se defiende con diez, es porque tácticamente hemos estado estupendos. El equipo lo ha hecho mucho mejor de lo que esperaba. Sólo nos ha faltado la finalización de las jugadas. Tiramos pero no entró y, al final, perdimos por los detalles. Lo típico en la Champions".
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