Las marionetas vuelven a la vida

Teatro en miniatura será el lema bajo el cual el 27º Festival de Títeres de Bilbao ofrecerá entre los días 7 y 16 de noviembre próximos un total de diez espectáculos de compañías vascas, navarras, catalanas, valencianas, portuguesas y búlgaras especializadas en el arte de hacer que las marionetas cobren vida. El público tendrá también a su alcance toda una serie de actividades paralelas como cursos, exposiciones, conferencias, cortometrajes y una muestra de marionetas autómatas.

La muestra, una de los más veteranas que celebra la capital vizcaína, cuenta con el apoyo del Área de Cultura y Educación del Ayuntamiento de Bilbao. El festival tendrá dos auditorios: la sala Bilborock y el salón El Carmen de Indautxu. El Centro Municipal del Distrito de Barrainkua ejercerá como sede del festival y albergará las actividades paralelas. En estas dependencias municipales de Abando radica desde hace una década la sede de Pantzerki, el Centro de Documentación de Títeres de Bilbao, "el único en su género en el Estado y sin duda un centro de referencia a escala internacional en esta modalidad de las artes escénicas", según los organizadores del evento.

Compañías vascas, portuguesas y búlgaras actúan en los diez espectáculos

Bilborock acogerá una muestra de títeres autómatas que se mueven gracias a medios mecánicos: El Show de los Grumildos de Ety Fefer gira en torno a "unas cautivadoras criaturas que son el reflejo de personajes marginales del mundo real con una peculiar combinación de falta de censura, respeto y mucha ternura", según la reseña de la obra en la web del festival.

Entre los diez espectáculos programados se encuentra Rosa, kontadazu ipuin bat!, una creación de la vizcaína Rosa María Martínez que narra un sueño infantil y un viaje en un tren de colores. Cenicienta, de Gus Marionetas, recrea por su parte el popular cuento infantil. Además, Txaribari, de Panta Rhei Producciones, refleja la convivencia y los conflictos entre familias procedentes de todo el mundo que conviven en un reducido espacio. Los búlgaros de Kalina Teatro ofrecen su versión peculiar del cuento de Los tres cerditos: el lobo feroz está encerrado en el zoo y atraca camiones cuando la ocasión lo permite.

Entre sus actividades paralelas, el festival incluye la proyección del cortometraje El hueco de Tristán Boj, obra de Paola Ortiz, así como un curso divulgativo para iniciar a los curiosos en la técnica para crear títeres con gomaespuma.