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Reportaje:

Gernika puede más que la lluvia

Unas 100.000 personas participan de la más importante feria agrícola vizcaína

El País

Ni la crisis económica, presente desde hace unos meses, ni la lluvia, que descargó hacia el mediodía, pudieron con el incuestionable poder de atracción del Último Lunes de Gernika, la más importante y popular feria agrícola de cuantas se celebran en Vizcaya y una de las más tradicionales del País Vasco. Cerca de 100.000 personas, según los datos de los organizadores, se acercaron ayer hasta la villa foral para propiciar un éxito de asistencia y de ventas. Tampoco la crisis parece haber sacudido en exceso a los propietarios del restaurante Taskas de Mungia, que elevaron su oferta hasta los 4.000 euros para hacerse con la puja por la mitad del queso ganador del concurso, La Lece, elaborado por el alavés José Mari Jauregi.

El mal tiempo que presidió la celebración de esta cita anual con los mejores productos del agro vizcaíno no deslució en ningún momento el panorama festivo. La organización destacó que, al contrario de lo que ocurrió en las anteriores ediciones en las que reinó mejor tiempo, el tránsito por el recinto ferial se notó ayer mucho más fluido, lo que, según indica, "ha favorecido a los productores, que han contado con un buen volumen de ventas y han hecho un balance muy positivo".

En lo referido a los premios que tradicionalmente se conceden durante la celebración de la feria, la ganadora en el apartado de Hortalizas fue Adelia Andikoetxea, de Urduliz, conocida como la reina de la huerta vizcaína por los más de 400 premios que ha ido conquistando en las ferias del País Vasco en los últimos 25 años. En su puesto conviven grandes tomates de hasta dos kilos de peso con guindillas de todos los colores o acelgas rojas y amarillas, sin olvidar las berenjenas blancas, los pepinos con pinchos o todas las variedades de pimientos, incluidos los morados.

En el concurso de frutas, el ganador fue otro clásico, José Etxebarria, de Gatika. "Cada día, cuando me acuesto, le doy vueltas a la cabeza, pensando cómo puedo mejorar una planta o un sistema de riego. A la mañana siguiente, me levanto temprano e intento llevarlo a la práctica", explica Etxebarria, jubilado de 83 años y ganador en la feria de Gernika de forma ininterrumpida desde 1984.

En el apartado dedicado a los txakolis, el premio al mejor caldo blanco se lo llevó Erdikoetxe, de Lezama. Sasikoetxe, de Larrabetzu, ganó el de mejor claro, y Agirre Llona, también de Lezama, el de mejor txakoli tinto. En flores ganó Mari Carmen Alzibar, de Gernika-Lumo; en miel-milflores, Jesús Olaizola, de Gernika-Lumo; y en miel-brezo, Valentín Llona, de Amorebieta; y en quesos ganó el ya citado José Mari Jauregi, de Ilarduya.

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