El petróleo cae al precio más bajo en 19 meses pese al recorte de la OPEP

El barril de petróleo tipo brent, de referencia en Europa, valía a principios de julio 146 dólares. Ayer, cerca de 62 dólares. La cesta de petróleos de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha recorrido un camino muy similar. Con la intención de frenar la caída de precios, este cartel del crudo ha decidido recortar su producción en un millón y medio de barriles diarios, cerca del 5% del suministro, a partir del 1 de noviembre. La operación, que Estados Unidos calificó de "medida antimercado", de momento no ha hecho efecto. Ayer, más bajadas.

"Hay demasiado petróleo en el mercado" y los almacenes "están llenos", dijo ayer en Viena el presidente de turno de la OPEP, el ministro argelino Chakib Khlelil, tras anunciar que a partir del próximo mes la agrupación que produce el 40% del petróleo mundial limitará su producción a 239 millones de litros al día. Según Khlelil, este recorte no tendrá influencia ni perjudicará el crecimiento económico mundial porque, de todas formas, "el crecimiento en EE UU y en Europa ya está muerto".

El precio del petróleo está viviendo, según la OPEP, "un dramático derrumbe sin precedentes en velocidad y magnitud". Por eso los 13 países miembros del cartel decidieron adelantar su reunión prevista para mediados de noviembre y negociar cuanto antes una solución. Pretenden frenar la caída en picado de los precios de su oro negro, que como consecuencia de la reducción de la demanda de combustible en esta fase de desaceleración económica y a la que además contribuye la mayor fortaleza del dólar, moneda en el que se compra esta materia, ha perdido el 40% de su valor. Según la OPEP, la actual crisis financiera "está teniendo un impacto patente en la economía mundial y está perjudicando la demanda en general y la de crudo en particular".

Pero la OPEP ayer se quedó con las ganas. Su anuncio no tuvo el efecto inmediato esperado por los productores. Los precios, lejos de subir, cayeron a su nivel más bajo desde marzo de 2007. En la Bolsa de Nueva York, el barril de petróleo de Tejas (de 159 litros) redujo su cotización en 3,99 dólares, situándose en 63,85 dólares (50,08 euros), mientras que en Londres el precio del barril de brent llegó a caer a los 61,08 dólares (47,95 euros).

La operación del cartel no sentó nada bien a diferentes Gobiernos, que temen que si la maniobra de los petroleros da su fruto, perjudique aún más sus economías. En Estados Unidos ha sido tildada de contraria a la competencia. "Siempre hemos apoyado que el valor de las materias primas, incluyendo el del petróleo, debería ser determinado en mercados abiertos y competitivos, y no por esas decisiones de producción antimercados", manifestó el portavoz de la Casa Blanca, Tony Fratto.

El ministro alemán de Economía, Michael Glos, pidió "responsabilidad" a la OPEP, para que no empeoren la ya difícil situación económica mundial. En la misma línea, el Gobierno del Reino Unido consideró "decepcionante" el movimiento, aunque el secretario de Estado británico de Energía, Mike O'Brian, se mostró confiado de que al menos se trate de una medida "destinada a frenar la caída de los precios más que a aumentarlos". El primer ministro británico, Gordon Brown, ya dijo hace una semana que sería "escandaloso" que la OPEP redujese la producción teniendo en cuenta la tambaleante economía mundial.