Los diputados deberán declarar sus cesantías en el IRPF
Los diputados y altos cargos de la Diputación de Guipúzcoa que cobren las cesantías (prestaciones económicas tras abandonar su puesto) deberán declarar estos ingresos en el Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF) como rendimientos de trabajo. Las Juntas Generales aprobaron por unanimidad, a iniciativa de Aralar, reformar la norma que regula este tributo con el fin de modificar el trato fiscal que tenían estas prestaciones forales.
Guipúzcoa acaba así con el vacío legal que existía sobre las cesantías y cierra el polémico debate abierto tras el verano de 2007, al conocerse que el ex diputado general Joxe Joan González de Txabarri y ocho miembros de su gabinete, acogiéndose a la norma foral que estaba en vigor, comenzaron a cobrar las cesantías tras finalizar su mandato en junio de 2007, pese a pasar a ocupar inmediatamente otros cargos.
El actual gobierno foral promovió la reforma legal que contemplaba el pago del 80% del sueldo a los cargos forales (6.524 euros para el ex diputado general y 5.525 para el resto). Con el cambio de la norma, acordado en noviembre de 2007, los diputados deben acreditar la situación de desempleo para cobrar un máximo del 40% del salario mensual durante un año.
Los diputados qué cobraron las cesantías no devolvieron estas prestaciones económicas (unos 300.000 euros en total), pese a la petición expresa que realizó la actual Diputación. Los partidos de la oposición criticaron ayer que estas cantidades no hayan sido devueltas.
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