López Obrador obliga a votar la reforma de Pemex fuera del Senado
El líder izquierdista Andrés Manuel López Obrador no logró impedir la reforma petrolera en México, pero impidió que se votara en el Senado, cercado por cientos de sus seguidores y custodiado por policías antimotines. Unos 120 senadores (de un total de 128) se abrieron camino entre los manifestantes hasta una sede alterna e iniciaron la sesión para aprobar los cambios que darán a la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) autonomía presupuestaria y financiera.
"La reforma sale hoy (ayer)", dijo un portavoz del Legislativo, que consideró que los opositores a los cambios "no ven el bien presente y presagian males futuros". López Obrador no ha revelado cuáles serán los pasos que dará tras la votación del Senado.
En la noche del miércoles, cuando la reforma se daba por hecha por los tres principales partidos -PAN (en el Gobierno), PRI y PRD (al que pertenece López Obrador)-, el líder opositor realizó una "votación popular" entre unos 17.000 mexicanos, de los cuales más de 11.000 rechazaron los cambios en Pemex. La oposición radical se dio a pesar de que un grupo asesor avalado por el propio López Obrador dictaminó que la reforma no es privatizadora. El PRD se ha desmarcado de hecho de su dirigente.
López Obrador, en declaraciones a W Radio, dijo que ve en el trabajo legislativo "gato encerrado", a pesar de lo cual reconoció que "indudablemente se avanzó, era realmente un monstruo lo que querían: prácticamente entregar toda la industria petrolera, privatizar refinación, conductos, almacenamiento. Eso se logró detener".
Los simpatizantes de López Obrador montan guardia en el centro de la Ciudad de México, en espera de las instrucciones de su líder, que ha asegurado que no descarta el bloqueo de carreteras, toma de edificios públicos o cierre de aeropuertos.
