La 'zona Higuaín'

Nació en Senigallia, pueblo de la provincia de Ancona, en 1906. Emigró con sus padres a Buenos Aires antes de cumplir un año. En su apogeo, dicen que se pintaba las uñas con esmalte y coronaba su melena rubia engominada con un sombrero de felpa de ala corta, medio ladeado, como hacían los dandis en la década de los 30. Así era Renato Cesarini, uno de los fundadores del fútbol argentino moderno, responsable de detectar talentos como Di Stéfano para la escuela del River Plate, de la que fue responsable. Sin Cesarini, La Saeta Rubia se habría quedado en Barracas. Sin Cesarini, Gonzalo Higuaín no habría hecho el gol del último derby y la suerte del Madrid y la del Atlético serían distintas.

"Me siento bien al final. Es una mezcla de físico y mente", dice el argentino

El punta, de 21 años, es el último heredero de la saga que inició Cesarini en el River

Higuaín, de 21 años, es uno de los últimos herederos de la saga que inició Cesarini. El atacante del Madrid que salió de River se caracteriza por ser el más efectivo a partir del minuto 85 de cada partido. El Atlético lo volvió a sufrir en el derby del sábado. Higuaín, autor del tanto del triunfo en su primera visita al Calderón, en 2007, ejecutó el penalti que dio los tres puntos al Madrid en el minuto 96.

"En la jugada del penalti yo no participé", recordó el argentino tras el partido; "Drenthe recibió de Van der Vaart y yo me limité a acompañar por la derecha. Después me tocó tirar el penalti. Pero no sabría decir por qué meto más goles en los últimos minutos. No sé explicarlo. Me siento bien en esa fase de los partidos. Es una mezcla de todo, de frescura física y mental. Estar en un equipo que no se rinde nunca te ayuda mucho. Cuando Simão marcó el gol del empate, nosotros nunca pensamos en que perderíamos dos puntos. Nos fuimos a ganar".

Hay habilidades que son inefables. En Argentina, Higuaín se hizo famoso metiéndole dos goles a Boca en su primer clásico. Desde que juega en el Madrid ha marcado tres goles a partir del minuto 85. En las últimas tres temporadas no ha sido el delantero que ha gozado de más tiempo de competición, pero sí el más certero en el último tramo del partido, en el que ha hecho tres goles decisivos. Van Nistelrooy le sigue con dos en una plantilla habituada a este tipo de situaciones. En las últimas tres temporadas, el Madrid ha resuelto ocho partidos después del minuto 85.

A ese tramo en el que se cierran los partidos, esos minutos que distinguen a los jugadores corrientes de los excepcionales, Cesarini consagró sus mejores goles. En Chacarita Juniors, en River Plate, en la Juventus y en la selección de Italia, Cesarini apareció en los momentos decisivos. Los hinchas italianos de entreguerras bautizaron los últimos minutos de los partidos como zona Cesarini. La expresión sobrevivió al héroe, lo mismo que su obra. Hoy, un integrante de su escuela juega en el Madrid y marca goles decisivos en los últimos minutos.

Drenthe, que salió del banquillo y provocó la sanción a Heitinga, habló de su gesta con humor. "Viví una gran alegría", dijo; "hasta el punto de que mis compañeros se reían de mí porque, cuando me derribaron, celebré la decisión del árbitro como si hubiera hecho un golazo". "Es genial ganar un partido así en el último minuto tras provocar el penalti", dijo el holandés, deprimido en los últimos días debido a su falta de participación en el equipo.

El Madrid viajará hoy a Turín, donde mañana se enfrentará a la Juventus en la Liga de Campeones. En la convocatoria de Bernd Schuster entraron Metzelder y Robben. El defensa alemán fue relegado a un segundo plano después de hacer un mal partido en la primera jornada de Liga. El delantero holandés regresó a la lista tras dos semanas de baja por una lesión muscular.

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