Vicepresidencia "depurará" responsabilidades en su geriátrico

La Vicepresidencia de Igualdade e Benestar anunció ayer que "depurará todas las responsabilidades" en el caso del geriátrico de Volta do Castro, en Santiago. La Xunta considera "inadmisible" que existan "problemas de funcionamiento" en "un centro en el que hay 154 trabajadores para atender a 147 residentes" y en el que "cada año se invierten 3,2 millones de euros en personal".

Familiares de residentes denunciaron que los ancianos que no se valen por sí mismos, incluso aquéllos que necesitan pañales, son bañados sólo una vez a la semana. Además, aseguran que algunos han adelgazado hasta 12 kilos porque nadie les ayuda a comer y que padecen deshidrataciones porque no se les ofrece agua. El ambiente en esta residencia donde trabajan funcionarios y personal laboral contratado es, según algunos familiares, "carcelario", y en ella no se atiende bien a los ancianos.

Vicepresidencia recordó en una nota que este centro, calificado como "VIP" el día de su inaguración, está considerado como "modélico" por la cantidad de personal, por los equipamientos "de calidad" (que costaron 1,2 millones de euros) y por las inversiones realizadas. Tras las denuncias, la Xunta acordó incorporar siete trabajadores más, y la Dirección Xeral de Acción Social dio "instrucciones precisas" para que se atiendan "una por una" las demandas de los familiares.