"La paridad es un camino, pero debe mandar el talento"

Centenares de mujeres con puestos ejecutivos en empresas multinacionales se desplazaron la semana pasada a Sitges (Garraf), donde se celebró de jueves a sábado la undécima convención de líderes de la asociación Red Internacional de Mujeres (WIN, en sus siglas en inglés). Bajo el lema la igualdad de género es buena para los negocios, mujeres con puestos de poder en diferentes empresas multinacionales se reunieron con el objetivo de renovar sus retos de futuro. "Cada vez hay más ejecutivas, pero cada vez hay más injusticias; hemos logrado romper un muro, pero siempre debemos continuar luchando", resume Kristine Erving, fundadora y directora de la asociación WIN.

Preocupa la conciliación de la vida familiar con el trabajo

Se debatió sobre el papel de la mujer en las empresas y la igualdad en puestos ejecutivos. La conclusión fue clara: "La paridad es un camino, pero debe mandar el talento", resume Helena Herrero, directiva de HP. "El 80% de productos están pensados para las mujeres, y el 60% de los graduados son chicas: talento nos sobra", agrega Elizabeth Trallero, de Congost Plastic, que dice: "En la Cámara de Comercio de Barcelona hay 70 hombres dirigentes y tres mujeres: estamos perdiendo a 32 ejecutivas talentosas".

Sin embargo, las conferenciantes avisan: ser mujer no es una razón válida para ocupar un puesto de responsabilidad, como alerta la nigeriana de Shell Keibi Atemie: "Si contratas una mujer incompetente no servirá de nada: debe primar el mérito".

Las conferencias sirvieron, además, para discutir uno de los temas que más preocupan a las ejecutivas: la conciliación de la vida familiar con un trabajo que requiere muchas horas. "Casarse, tener hijos y trabajar a dedicación completa es imposible: debemos apostar por la media jornada", reclama Trallero, que ha podido compaginar el cuidado de sus tres hijos con la actividad empresarial.

Las más jóvenes lo tienen claro: "No pienso renunciar ni a la familia ni al éxito en los negocios", sostiene Aisuluu Eralieva, ejecutiva de Kyrgyzstan de 22 años. Las diferencias en el trato a las mujeres entre los diferentes países que asisten a la conferencia son evidentes: "En Kyrgyzstan sólo mandan los hombres", explica Eralieva. Atemie, de Nigeria, añade: "Todos esperan que la mujer se haga cargo de todo".

Según el Índice de Igualdad de Género que elabora el Foro Económico Mundial, Suecia, Noruega, Finlandia e Islandia son los países con mejor igualdad de género, con un índice del 80%. España ocupa el décimo lugar con el 74% de igualdad; Nepal, Pakistán, Chad y Yemen son los países donde menos se respeta a las mujeres.

PATRICIA FRANCIS

Jamaica

Patricia Francis es directora ejecutiva del Centro de Comercio Internacional de Naciones Unidas. Vive en Suiza y, pese a que uno de sus hijos reside en Jamaica y otro en Barcelona, debe estar pendiente al minuto de la familia. "Mis hijos siempre me llaman a mí: soy mamá, quien soluciona siempre los problemas", explica. Se lo toma con filosofía: "La familia y el trabajo esperan de ti dedicación completa. Lo mejor es dar más del 100% a cada uno. Es duro, pero es lo que debo hacer", apostilla.

BENDITA THAPA

Nepal

A sus 25 años Bendita Thapa es secretaria general de la Fundación para las Mujeres de Nepal, país que ocupa uno de los últimos puestos en el índice de igualdad del Foro Económico Mundial. "La mujer depende del hombre, no tiene la posibilidad de liderar empresas; el 99% de los puestos ejecutivos son para hombres y la mujer no puede acceder a puestos de poder", lamenta. Su asociación lucha desde 2001 para que la mujer tenga visibilidad en Nepal: "Espero que con la globalización llegue la igualdad".

KEIBI ATEMIE

Nigeria

Keibi Atemie es abogada y trabaja para la compañía petrolífera Shell. Madre de cinco hijos, se considera afortunada: "Tengo una familia muy amplia y he podido cuidar de mis hijos gracias a la ayuda de todos", narra. Se define como "una mujer normal" en un país en el que es habitual ver a mujeres en altos cargos: "En Nigeria hay muchas mujeres en puestos de decisión; aunque la sociedad dice que la mujer debe cuidar a la familia".

AISULU ERALIEVA

Kyrgyztan

Criada en Kyrgyzstan y graduada en la universidad americana de Bulgaria, Aisulu Eralieva, de 22 años, volvió hace dos a su país natal para ejercer de auditora de la empresa Deloitte. "Mis amigas del colegio están todas casadas y con hijos; sólo piensan en servir a sus maridos. Siempre me preguntan: '¿dónde está tu anillo?'. Yo quiero tener éxito en los negocios y tener hijos", sostiene. Eralieva lamenta el trato diferencial que recibe de sus compañeros. "Cuando me ven piensan que soy bonita, no que tengo celebro".