Del UHF a la TDT

Es sabido que los presentadores de televisión pueden desgranar sus discursos sin quitar la mirada del rostro de los hipotéticos espectadores, gracias al teleprompter, un aparatito que les va deslizando las frases. Sin embargo, son pocos los que han visto uno en vivo y menos aún los que lo han probado. Experimentar un teleprompter es uno de los motivos para visitar Adéu a la tele! De l'UHF a la TDT, una divertida exposición, abierta en el Palau Robert, que se propone familiarizar a los ciudadanos con la televisión digital terrestre, que está sustituyendo la analógica. En Cataluña, antes de finales de este año, 24 comarcas estarán equipadas con el nuevo sistema, cuya implementación se completará en julio de 2009, ocho meses antes del fatídico 3 de abril de 2010, fecha prevista para la desaparición del sistema televisivo tradicional en toda España. El 60% de los hogares ya están adaptados a la TDT, según la Generalitat.

El público puede buscar sus programas preferidos en un cajón

"Hemos hecho hincapié en la idea de televisión a la carta que rige la TDT para crear una exposición a la carta en la que el visitante puede elegir los contenidos", explica el periodista Xavier Morral, comisario, junto con Carles Capdevila, del proyecto que ha contado con la dirección artística de Pep Gatell, de La Fura dels Baus.

El público puede buscar sus programas preferidos, revolviendo en un cajón como los de las rebajas, donde en lugar de camisetas hay pantallas tamaño folio, con proyecciones de programas de todo tipo y toda época, también en blanco y negro. La forma en que se configura gráficamente la realidad antes y después de la televisión se plasma en una serie de reproducciones de obras famosas acopladas a sus homólogos audiovisuales. Por ejemplo La lección de anatomía, de Rembrandt, junto a un fotograma de C.S.I., el Pantocrátor con el papa Ratzinger, y Los fusilamientos del 3 de mayo de Goya con una imagen del 23-F.

Las explicaciones didácticas sobre las TDT llegan de forma súbita y un poco traicionera cuando el visitante se encuentra tendido en una cama mecanizada, dentro de un túnel tipo TC, donde se ha metido con la promesa de ver las mejores imágenes y las mejores pifias de la historia. Sin embargo, antes del vídeo elegido, no puede evitar tragarse dos minutos de explicaciones sobre las ventajas de la TDT. "Algo así como la pausa publicitaria", admite el comisario. Datos, citas e informaciones, todo está en pantalla, incluso las cartelas han sido sustituidas con teleprompters. Para acabar, el público puede votar entre 100 producciones realizadas en Cataluña para escoger la mejor. "La exposición intenta ofrecer claves para reflexionar sobre la tele que se ha hecho hasta ahora, sobre la que se consumirá y sobre los cambios de los hábitos tras la incorporación de las nuevas tecnologías, Internet y la telefonía móvil", concluye Morral.