El huracán Ike pone al Caribe en alerta máxima
Cientos de miles de personas son evacuadas en Cuba, Haití y Bahamas
Amplias zonas del Caribe se encuentran en estado de máxima alerta a la espera del embate de Ike, el cuarto huracán y el más fiero de las últimas tres semanas. Los meteorólogos han destacado su "extrema peligrosidad", una tormenta tropical de intensidad 4, de un máximo de 5 de la escala Saffir-Simpson, con vientos de más de 200 kilómetros por hora, aunque anoche se debilitó ligeramente, hasta la categoría 3.
En Haití, Ike causó ayer 48 muertos, entre ellos 13 niños, en la localidad de Cabaret, cerca de Puerto Príncipe, que quedó anegada. Se temía que hubiese más víctimas. La sucesión de temporales está dificultando las labores de asistencia en un país aún inmerso en la devastación causada por los huracanes Gustav y Hanna, que han dejado 600 muertos y medio millón de afectados, y han destruido las cosechas. Ike se ha llevado el único puente de acceso a Gonaives, la población más castigada por los anteriores temporales, y donde el nivel del agua ha vuelto a subir. Según las organizaciones humanitarias, se avecina una catástrofe.
El temporal causa 48 muertos en la localidad haitiana de Cabaret
Tras barrer las islas Turcas y Caicos, donde el 80% de las viviendas se han visto afectadas, y destrozar tejados y arrancar árboles en el sur de las Bahamas, Ike se dirigía anoche a Cuba, donde se le esperaba entre la noche de ayer y la mañana de hoy.
El Centro Nacional de Huracanes de Miami advirtió ayer que Ike podría provocar intensas lluvias, inundaciones repentinas y corrimientos de tierra. Los países caribeños han decretado medidas de emergencia, y cientos de miles de personas, incluidos los turistas, han sido trasladadas a refugios y zonas seguras.
En Cuba, Ike recorrerá la isla de oriente a occidente durante 24 horas, y amenaza los campos de caña y los desvencijados edificios coloniales de La Habana. Las autoridades trataban de evacuar ayer a cientos de miles de personas de las áreas costeras del este y el centro de la isla. Los turistas concentrados en los complejos hoteleros del norte, entre Guardalavaca y Varadero, fueron instalados en el interior.
Según las previsiones, Ike perdería intensidad al entrar en Cuba, para fortalecerse de nuevo en aguas del golfo de México. Se trata de la cuarta tormenta tropical de la temporada, después de Fay, Gustav y Hanna.
