Patxi López pide al 'lehendakari' que no haga el "ridículo" yendo a Estrasburgo

El líder del PSE-EE, Patxi López, evitó ayer el dramatismo o la descalificación para responder a la iniciativa del lehendakari Ibarretxe y su Gobierno de presentar recursos individuales ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) si el Tribunal Constitucional impide la celebración de la consulta aprobada por el Parlamento vasco para el 25 de octubre.

López apeló a la responsabilidad de Ibarretxe para solicitarle de desista de hacerlo, "por respeto al cargo que ocupa, y por ahorrarnos el bochorno de verles haciendo el paripé en Europa, donde los vascos tiene fama de gente seria".

Expresa su preocupación por el "desprestigio" de las instituciones

En su opinión, resulta "ridículo" un propósito que supone que el máximo representante del Estado en el País Vasco, el lehendakari, "se lleve a sí mismo a los tribunales". Al dirigente socialista no le inquietan las consecuencias jurídicas de la iniciativa, que considera inviable y sin más base que las "obsesiones particulares de Ibarretxe" y con la que pretendería escenificar "una falsa confrontación con el Estado". Su único objetivo sería, dijo, utilizarla como "bandera electoral" para "rentabilizar" en las urnas una postura de "victimismo". Sin embargo, se mostró preocupado por "el desprestigio al que se quiere someter a las instituciones". López reprochó a los partidos del Gobierno que sólo se pongan de acuerdo en defender la consulta y no el los "temas importantes". Calificó asimismo de "escándalo" los cinco millones de euros gastados en una consulta que ya se sabía que "no tenía recorrido o legal".

Siguiendo el guión de los últimos días, el secretario general del PSE defendió como compatible la oposición dura al tripartito por la cuestión de la consulta soberanista con la colaboración en la gobernabilidad. Por ello, adelantándose a la negociación de los Presupuestos del Estado entre el PSOE y el PNV, volvió a reiterar su disposición a apoyar en Euskadi "por responsabilidad" las últimas cuentas de la legislatura y solicitó al Gobierno Vasco que ponga "encima de la mesa" un proyecto "para negociarlos y aprobarlos". "No estamos dispuestos a que el país se paralice" y que "se dejen de destinar los recursos públicos cuando son más necesarios que nunca", indicó. Al mismo tiempo, lanzó un capotazo al presidente Rodríguez Zapatero al afirmar que los socialistas vascos siempre han sido partidarios de que el Gobierno central busque el apoyo del PNV a sus Presupuestos, "porque es importante la implicación de los nacionalistas en el Estado". No obstante, se esforzó por separar ambos ámbitos de negociación.

En su comparecencia para presentar el análisis de la ejecutiva socialista del martes sobre la situación política, López anunció que a mediados de este mes el PSE organizará en Bilbao unas jornadas económicas, en las que expondrá el programa de medidas que ha elaborado para intentar hacer frente a la actual situación económica. A estas jornadas seguirán otras dedicadas a la cultura o la vivienda, que culminarían el trabajo desarrollado por los socialistas en colaboración con expertos ajenos al partido para preparar su alternativa al nacionalismo en las próximas elecciones.

Basagoiti ataca

Por su parte, el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti expresó su sospecha de que las disposiciones cruzadas entre el PNV y los socialistas a negociar los presupuestos del Estado y del País Vasco forma parte de un acuerdo para "no pisarse la manguera". El arreglo sería, dijo, que Ibarretxe "seguirá siendo lehendakari" pase lo que pase en las próximas elecciones, a cambio que los peneuvistas "dejen en paz" al presidente del Gobierno en las Cortes. Pese a su acerada critica, Basagoiti explicó en Vitoria que próximamente se reunirá con Patxi López y con el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, para tratar de atraerles a su idea de convocar una gran manifestación de apoyo a la Y ferroviaria, una iniciativa que ambos no ven necesaria.