"El 5022 da la vuelta y cambiamos el avión"

Los pasajeros del MD-82 siniestrado en Barajas nunca supieron lo cerca que estuvo Spanair de cambiarles de avión. El vuelo JK5022 tenía prevista su salida a las 13.00 horas del pasado 20 de agosto con destino Las Palmas de Gran Canaria. A las 13.20 el avión comenzó a rodar hacia la pista 36L. Cinco minutos más tarde, el comandante, Antonio García Luna, recibió autorización para despegar, pero un piloto encendido en la cabina le indicó que una sonda que mide la temperatura exterior no iba bien. Y decidió dar la vuelta. A las 13.42 estaba de regreso para revisar la avería.

Spanair: "Como la 5022 se nos ha dado la vuelta, ahora vamos a cambiar la matrícula"

Barajas: "Ya tienes puesto el retraso y le cambiamos la matrícula"

Spanair: "Ahí lo dejamos, porque a lo mejor se soluciona el problema técnico"

Siete minutos después, a las 13.49, el responsable de operaciones de Spanair llama al jefe de operaciones del aeropuerto y le comunica que van a cambiar el avión, matrícula EC-HFP, por otro MD-82, con matrícula EC-HFS, que la compañía tenía libre.

-Como la 5022 [del vuelo JK5022] se nos ha dado la vuelta ahora vamos a cambiar la matrícula y le vamos a poner saliendo como Hotel Fox Sierra [HFS, la matrícula del nuevo aparato]. Tras comprobar los datos, el Centro de Gestión Aeroportuaria anota: "Ya tienes puesto el retraso y le cambiamos la matrícula". Entonces, el técnico de Spanair pide: "A ver si me puedes poner en la puerta Charlie 49, para sacarlo por ahí, que tenemos ahí ya a las personas y todo".

En la conversación se escucha de fondo cómo el empleado de Spanair se dirige a un compañero: "Oye, intenta ver si se lo podéis decir a catering". La compañía preparaba todos los detalles del cambio de aeronave.

La conversación, de tres minutos y 38 segundos, se produce en un tono coloquial, casi amistoso. Justo antes de colgar, Spanair advierte de que el cambio de avión puede no ser definitivo.

-Y ahí lo vamos a dejar porque no sé yo si te tengo que llamar porque a lo mejor se soluciona el problema técnico.

-Vale, cuando sepas algo pues me llamas.

El dato de que Spanair había pedido cambiar el avión lo aportó el viernes en el Congreso la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez: "La compañía pidió al aeropuerto la posibilidad de sustituir la aeronave por otra, aunque finalmente decidió continuar con la misma". Tras el revuelo que se formó -hasta la web de la BBC lo destacó en portada-, Álvarez intentó quitarle importancia. Fue en la réplica: "Es algo más normal. Me imagino que le dijo: 'Ve anotando otra matrícula por si tengo que cambiar de avión".

En un primer momento, Spanair no opinó sobre las declaraciones de Álvarez, pero ayer emitió una nota en la que desmentía a la ministra: "Cuando el piloto solicitó volver a la plataforma, la compañía informó al aeropuerto que, (...) ante la eventualidad de que hubiera que cambiar de avión, existía otro disponible". El comunicado concluye: "En ningún momento indicó que fuera su intención sustituir el avión accidentado". Las grabaciones demuestran que sí llegó a pedir el cambio y que se le concedió. Sólo nueve minutos después, a las 13.58, Spanair vuelve a llamar a la torre y anula el cambio.

-El pesado de Spanair, hijo-, arranca el técnico de la aerolínea.

-No, hombre. Ojalá fueran todos igual de pesados que tú.

-A ver, te digo: tenemos que deshacer otra vez la salida del Hotel Fox Sierra este. Va a ser el Hotel Fox Papa [HFP, el siniestrado]; o sea, que se va a mantener.

Esta segunda conversación dura minuto y medio. Sólo 25 minutos más tarde, AENA autoriza el despegue. Y dos minutos después, a las 14.25, el vuelo se sale de la pista nada más tomar altura. La tragedia ya es monumental.

Spanair insiste en que siguió el procedimiento habitual: "Ante cualquier factor de índole técnica, operativa o meteorológica, el procedimiento estándar de cualquier compañía aérea es comprobar si se dispone de aviones de reserva por si es necesario su sustitución para minimizar inconvenientes y posibles demoras". Un piloto de la aerolínea confirma que en cuanto un avión aborta un despegue "se comienza a preparar otro avión, si es posible, porque no sabes cuánto va a durar la avería". El Colegio Oficial de Pilotos coincide en que es lo usual.

Spanair afirma que si el avión salió fue porque "tras una evaluación inicial de la incidencia detectada y del tiempo estimado para su reparación, los técnicos de mantenimiento decidieron que no sería necesario el cambio de avión al tratarse de una reparación menor" que llevaría menos de 15 minutos. La compañía señala que el avión estuvo 33 minutos en manos de los mecánicos, y que el cambio de aparato "habría implicado un retraso superior a los 60 minutos". Los mecánicos no arreglaron el calefactor de la sonda, sino que lo desconectaron. La normativa permite volar 10 días sin ese sistema.

Además, otra grabación revela que a las 14:33, ocho minutos después del accidente, AENA llama a los bomberos de la Comunidad de Madrid para pedirle medios y le explica que, "según el plan de emergencias de Barajas", acudan al punto de reunión tres. La cinta responde a la Comunidad de Madrid, que ha sugerido que AENA reaccionó con retraso a la catástrofe y que no activó el plan de emergencias con celeridad. Tres minutos después del siniestro llegaron al aparato los primeros bomberos de Barajas.