"Habría que tener más competencias en Justicia"

Usa el ordenador sólo "excepcionalmente". Pero González Nieto clama por una informatización total de la justicia, "el remedio a muchos de los males". Y este magistrado de lo social, que presume de ser "accesible y abierto", denuncia también demasiada burocracia. "Si los problemas dependiesen exclusivamente de mí, la mayor parte estarían resueltos", afirma.

Pregunta. La Justicia, en Galicia, es excesivamente lenta.

Respuesta. Sí, lenta y tiene que ser moderna, ágil y eficaz.

P. No parece que lo sea...

R. En la actualidad no. Pero en otros países tampoco. La Justicia gallega en resolución de casos está en la media nacional. Alguna jurisdicción va muy lenta. Pero hay que atender a la calidad de los asuntos: narcotráfico, blanqueo de capitales. Y la excesiva movilidad de los jueces.

"La Justicia depende de demasiados organismos, ese es el problema"

"Si no confirman mi cargo, lo consideraré como un cese"

"No se tomaron medidas de auxilio para acelerar el caso 'Prestige"

P. Los jueces no quieren quedarse y afecta a los juzgados. ¿Cómo resolverlo?

R. Antiguamente había muchísimos jueces gallegos. Ya no. Hay mucha rotación de plazas por ascensos y un juzgado enseguida se queda sin titular. Es un problema. No me canso de repetir que el funcionamiento de un juzgado depende de todos sus funcionarios, no sólo del juez. Las plantillas son insuficientes y el juzgado funciona mal. Y falla el sistema de nombramiento de los interinos. Tardan dos meses en cubrir plazas vacantes y no se forma a este personal. Si está de baja el funcionario que lleva las ejecuciones de las sentencias, ya armamos el problema.

P. El personal de Justicia es competencia de la Xunta.

R. El gran problema de la Justicia es que intervienen demasiados organismos. El Consejo del Poder Judicial, el Ministerio de Justicia que aprueba las dotaciones presupuestarias, la Xunta, que aporta medios personales y materiales. No hay queja con la Consellería de Presidencia. En cuanto se le dice que falta personal, da todo tipo de facilidades. Pero hay demasiados trámites burocráticos que cubrir.

P. Hace un año se declaró dolido por las críticas del conselleiro al mal funcionamiento de la Justicia.

R. [Se ríe]. La verdad es que el tribunal está funcionando correctamente a pesar de que no se me nombre definitivamente presidente. Quizás el conselleiro se excedió en el vocabulario. Aquellas declaraciones no me gustaron, pero soy un hombre abierto, con relaciones fluidas con todo el mundo. Y una relación institucional magnífica con el conselleiro y con la Xunta.

P. Usted, como presidente en funciones...

R. Eso de en funciones no me gusta nada.

P. Pero es así.

R. Sí. Sin embargo, cuando se refieren al Consejo del Poder Judicial no dicen que está en funciones, ni el Tribunal Constitucional u otros 80.000 organismos que también lo están.

P. Este bloqueo de la renovación de los cargos judiciales, ¿no daña la imagen de la justicia?

R. Claro. Tendría que estar resuelto ya. Si esto fuera una relación laboral, yo habría adquirido relación indefinida y fijeza. Debería ser confirmado por experiencia y por méritos. Llevo aquí casi tres años y, si no me confirman en el cargo, lo consideraré un cese. Ante la opinión pública no se entendería que me cesasen después de llevar tres años. Parecería que no lo hago bien cuando estoy cumpliendo, me multiplico por diez. Llevo la presidencia del Tribunal y también la de la Sala de lo Social y dicto sentencias.

P. ¿La situación de temporalidad afecta a la Justicia?

R. Falla el sistema judicial. El gran problema es su lentitud. No obstante, ha mejorado muchísimo en los últimos años. Falla el sistema porque requiere crear más y más unidades judiciales cuando la solución no es ésa, sino la raíz del problema.

P. ¿Y cuál es la raíz?

R. La excesiva cantidad de asuntos que llegan a los tribunales. En la Sala de lo Contencioso-Administrativo hay muchísimos recursos por multas de tráfico y no deberían llegar ahí. O en la Sala de lo Social, el número de casos de incapacidad laboral. Son como el tejido de Penélope, no se acaban nunca, porque un señor cuando no se le concede la incapacidad laboral o la invalidez, sigue pidiéndola a ver si la logra. Lo mismo con las multas de tráfico, como un frontón. Se recurre por sistema, el particular y la propia administración.

P. ¿Es posible mejorar?

R. Sí. Tampoco es la imagen catastrofista de la Justicia. Hace falta modernizarla, gestionarla mejor y darle más medios. Dependemos de demasiados organismos. Habría que transferir más competencias de Justicia a la comunidad autónoma, pero con dotación presupuestaria.

P. ¿A qué se refiere con "mejorar la gestión"?

R. A los medios informáticos. Se está digitalizando todo, pero en cada comunidad se usa un sistema diferente, lo que impide crear una base de datos común. Es importante que se puedan cruzar datos entre jueces, fiscales, policía judicial.

P. ¿Crecen las denuncias urbanísticas y medioambientales?

R. Hubo especulación feroz y mucha corrupción urbanística. También es importante el número de denuncias medioambientales o por incendios. Afortunadamente, hubo un descenso el año pasado y esperamos que se mantenga.

P. Los partidos llevan cada vez más a los tribunales asuntos de la vida política...

R. Sí, el tema judicial se politiza mucho. Y me parece fatal que cuando un tribunal dicta una resolución, se cuestiona cada vez más. Hay que acatar las sentencias. Si no se está conforme, que se recurra, para eso está.

P. ¿Hay presión de los políticos sobre los jueces?

R. No. Los jueces son independientes. Otro tema es que en los nombramientos influyan factores que no debieran. Eso no quita que cada juez tiene su corazoncito y sensibilidad. Unos progresistas, otros conservadores o liberales, pero ahí están las leyes y los jueces tienen que aplicarlas aunque no les gusten.

P. ¿No es contradictorio que los políticos decidan el Consejo del Poder Judicial?

R. Veo bien que intervenga el Parlamento, pero no que sólo intervengan los jueces de los dos sindicatos que cortan el bacalao. Hay jueces que, como yo, no pertenecemos a ninguna asociación profesional. En el nombramiento de cargos judiciales debe primar el currículo, la experiencia, las cuotas. Hay quien no debería llegar a ciertos puestos porque carecen de capacidad de diálogo y conciliación.

P. ¿Le presionaron alguna vez?

R. Se discutió mucho sobre si en el caso del Prestige era correcto o no admitir una querella. No me puedo meter en eso pero sí intervenir por el retraso.

P. ¿Tras casi seis años, habrá juicio del Prestige?

R. Debería salir en el primer trimestre del 2009 o como mucho en el segundo. Es una pena que todas las medidas de auxilio que se adopten ahora no se tomasen antes. Se hubiese solucionado si no dependiese de tantos organismos. Pero con este empujón se va a abrir juicio oral.