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China y Rusia echan el freno a las adopciones

El número de niños acogidos por españoles cae un 40% en dos años

Adoptar niños en el extranjero es cada vez más difícil para las familias españolas. Las adopciones internacionales han caído casi un 40% en los dos últimos años. El endurecimiento de los requisitos impuestos por China y Rusia, los dos principales países de origen, es el culpable del descenso.

Pekín sólo acepta ahora a parejas con un cierto nivel de renta y estudios

En 2007, se adoptaron en España 3.648 niños y niñas, un 18% menos que en 2006, según los datos difundidos ayer por la secretaria de Estado de Política Social, Amparo Valcarce. Sólo en China y Rusia se han adoptado 1.000 menores menos que en 2006, lo que supone un descenso de un 40% y un 26%, respectivamente. Aunque ambos países continúan como primero y segundo en la lista de países de origen. Casi 12.000 familias solicitaron una adopción en 2006, el último año del que se tienen datos.

En el caso de la Federación Rusa, el descenso se debe a que se han fortalecido las exigencias a las Entidades Colaboradoras en Adopción Internacional (ECAI), encargadas en la vía privada de tramitar los expedientes en los países de origen. La modificación legislativa provocó, además, un parón de varios meses en los procesos.

Entre las nuevas condiciones que impone la República Popular China, ha sido muy relevante el requisito de que la familia adoptante sea una pareja, según Valcarce. Además, los interesados tienen que acreditar un nivel de renta determinado y que ambos miembros hayan superado, como mínimo, el bachillerato o la formación profesional superior. Tanto en Rusia como en China, las familias españolas encuentran una creciente competencia de otras europeas, con un aumento importante de solicitudes en países como Alemania o Francia.

Detrás de las nuevas exigencias chinas, según Carlos Nina, presidente de la ECAI Interdop, se encuentra el afán de las autoridades por solucionar el déficit de mujeres que sufre el país, consecuencia de décadas de una política de hijo único que ha llevado a abortos selectivos e infanticidios. La inmensa mayoría de los menores adoptados en China son niñas. Por otro lado, el desarrollo económico del país ya está frenando el número de niños que se dan en adopción.

Frente al acusado descenso en países "tradicionales", otros se consolidan, como Ucrania o Etiopía. Ucrania es el cuarto país en adopciones, con 338 menores. Y Etiopía está ya en el tercer lugar. En 2007, se adoptaron en España 481 niños etíopes, lo que supone un aumento del 36% con respecto al año anterior. "Se está produciendo un movimiento natural hacia África, donde hay más niños en situación de poder ser adoptados", explica la psicóloga experta en adopciones Ana Berastegui.

Pero en África hay condiciones que dificultan esta transición, según Berastegui. Los países musulmanes no permiten la adopción. Y, en el resto, la falta de infraestructuras y de seguridad jurídica dificulta que las adopciones llenen el hueco que dejan Rusia y China, por mucho que aumenten. Algunos, como Etiopía, quieren asegurarse de que controlan el proceso. Hasta ahora, todas las adopciones del país se han tramitado en un solo juzgado de la capital, Addis Abeba.

Se espera que la entrada en escena de Vietnam, con quien España ha firmado un convenio bilateral, permita aligerar las demandas de adopción. Según Miguel Ángel Anguita, de la ECAI Creixer Junts, existen "buenas expectativas", porque se trata de un país "con una legislación consolidada". Además, a las familias les importa ahora menos el país de origen de los niños.

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