Moratinos será en 2009 el primer ministro español que visite Gibraltar

El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, aceptó ayer la invitación del ministro principal gibraltareño, Peter Caruana, para celebrar el año que viene en Gibraltar la próxima reunión ministerial del Foro Tripartito, como se denomina a las conversaciones sobre cooperación a tres bandas (Reino Unido, España, Gibraltar) que se desarrollan desde febrero de 2005 y que ayer tuvieron en Londres su segundo encuentro de ministros.

El gesto de Moratinos tiene un gran valor político y es una afirmación de la política de diálogo y cooperación puesta en marcha por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero tras fracasar los intentos de Londres y Madrid por lograr un acuerdo sobre la soberanía del Peñón. En julio de 2005 el Foro se reunió en Faro (Portugal) por la negativa española a convocarlo en suelo gibraltareño, aunque aquella cita no tenía rango ministerial.

Ni la delegación gibraltareña ni la española recordaban ayer el precedente de una visita de un ministro español en ejercicio al Peñón, aunque fuentes de Exteriores puntualizaron que ésta se producirá en el marco estricto del Foro Tripartito y que algunos ministros españoles han utilizado en los últimos meses el aeropuerto gibraltareño.

El levantamiento de las restricciones al tráfico aéreo en el Peñón y el uso conjunto del aeropuerto fueron dos de los principales acuerdos alcanzados por el Foro en 2006. Otros tuvieron que ver con las pensiones de los trabajadores españoles afectados por el cierre de la verja en 1969 -cuyo segundo plazo abonó el Reino Unido en abril- o la apertura de una sede del Instituto Cervantes, la primera de un organismo oficial español en el Peñón. Carmen Caffarel, directora del Instituto, confirmó ayer que ya dispone de un céntrico inmueble para su sede en Gibraltar, cuya rehabilitación costará unos 250.000 euros y que podría inaugurar Moratinos en 2009.

El jefe del Foreign Office, David Miliband, fue el anfitrión de la reunión de ayer, en la que se fijaron seis objetivos generales para "asegurar que la cooperación y la confianza mutua se conviertan en norma": medio ambiente; servicios financieros y fiscalidad; cooperación judicial; aduanera y policial; educación (con especial énfasis en el bilingüismo gibraltareño); comunicaciones marítimas; y visados.

Moratinos anunció la puesta en marcha de un sistema de alerta rápida, con sendos oficiales en permanente comunicación en los puertos de Gibraltar y Algeciras, para evitar nuevos accidentes como el hundimiento del buque chatarrero New Flame, en agosto del año pasado.