Ibarretxe guarda silencio tras la aprobación de su consulta

El debate sobre la gestión del "día después" de la aprobación de la ley de la consulta por el Parlamento vasco empezó ayer por la reunión de la ejecutiva del PNV. El lehendakari se incorporó a ella avanzada la tarde, después de permanecer hasta pasadas las cinco en la clausura de la asamblea de la patronal alavesa (SEA) en Vitoria.

En espera de esa reunión, que dibujó los primeros trazos de la administración de la situación, al menos en lo inmediato, Ibarretxe ha evitado referirse a la consulta desde la sesión plenaria del viernes.

Ni el domingo en su visita a la Expo de Zaragoza, ni ayer, en sus dos actos públicos -la inauguración por la mañana de unas jornadas del Parlamento sobre el Tratado de Lisboa y las regiones y la clausura de la asamblea de SEA por la tarde- hizo la más mínima mención de ella. Cualquiera de los dos se hubiera prestado, por lo que su silencio no puede interpretarse sino como algo deliberado.

Ibarretxe parece querer darse tiempo antes de volver a hablar de la consulta. Posiblemente, y al menos, hasta que el Gobierno la impugne, lo que ocurrirá el mismo día en que salga publicada la ley en el Boletín Oficial del País Vasco (BOPV). Y esto puede pasar en cualquier momento, incluso hoy mismo.

Hasta con esta cuestión tan técnica trata el Gobierno vasco de levantar expectación, como ha hecho con cada detalle, aunque fuera nimio, durante todo el proceso de concreción del plan desde que lo expuso en septiembre de 2007.

La vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, a la que le preguntaron ayer en una entrevista en Radio Euskadi cuándo se publicará la ley, si hoy o mañana, respondió: "No lo sé. Se publicará cuando toque".

Pese al silencio del lehendakari, la continuidad la mantuvo ayer la propia Zenarruzabeitia. Ésta señaló que el Gobierno vasco responderá "con contundencia", tanto jurídica como institucionalmente, e insistió en que "contenidos similares" a los de las dos preguntas planteadas en la consulta fueron objeto de negociación entre el Gobierno y ETA durante el proceso de paz. "Estuvieron dispuestos a acordarlos con Batasuna", afirmó Zenarruzabeitia. La vicelehendakari achacó "autismo" político y parlamentario al presidente del Gobierno y al grupo socialista en la Cámara vasca.