"Pagar algo más por el pescado no debería extrañar a nadie"
Javier Garat (37 años, Sanlúcar de Barrameda), secretario general de Cepesca, la patronal que agrupa a 1.400 armadores y 1.600 buques pesqueros, reconoce que no han conseguido ninguna ayuda a corto plazo pese al amarre de los buques en puerto. Sin embargo, dice estar satisfecho porque el Gobierno y la Comisión Europea han cambiado sus puntos de vista y reconocen el momento "crítico" que atraviesa el sector. Asegura que hay que tomar medidas para elevar el precio en origen que se paga por el pescado.
Pregunta. Han amarrado 27 días la flota de altura, pero ¿ha merecido la pena?
Respuesta. Sí. Después de un gran sacrificio, ha merecido la pena. Aunque no se haya logrado todo, se han conseguido cosas importantes.
P. ¿Qué cosas?
R. Cambiamos la opinión de la Comisión Europea sobre cómo afrontar la crisis del sector pesquero. Han reconocido la desesperación que estamos viviendo y asumen que la única salida no es el desguace, sino que se planteen medidas a corto, medio y largo plazo.
P. ¿Y más concretamente?
R. Han presentado una serie de medidas que plasmarán en una propuesta de Reglamento que se discutirá el 15 de junio en Consejo de Ministros de los países de la UE. Tenemos la esperanza de que parte de esas medidas se puedan aplicar de forma inmediata.
P. ¿Cómo valoran la actuación del Gobierno español?
R. Al principio intentaba atenuar la gravedad de la crisis, pero hoy la reconoce y de hecho plantea en Bruselas muchísimas de nuestras peticiones. Eso es para nosotros otro éxito.
P. Pero no han conseguido las ayudas que pedían
R. Efectivamente, a corto plazo, en España no hemos conseguido casi nada. Ni la exoneración de las cuotas a la Seguridad Social, ni que nos cofinancien los contratos de cobertura. Lo que ha ofrecido el Gobierno han sido más ayudas de mínimis para la flota artesanal y la reducción de las tarifas portuarias, que en realidad solo va a afectar a la flota de pesca fresca. A nosotros nos han ofrecido el aplazamiento de los pagos a la Seguridad Social sin coste. No es nada del otro mundo.
P. ¿Y de cara al futuro?
R. Para el medio y largo plazo, la ministra se ha comprometido a poner en marcha nuestras reivindicaciones. En el ámbito comercial y de mercado, confiamos en que refuercen el control de las importaciones de pescado ilegal y mejoren el etiquetado para poder diferenciar el producto capturado por barcos españoles en el extranjero. Además, nos aseguran que financiarán proyectos de I+D+i porque necesitamos modernizar los barcos para hacerlos más eficientes energéticamente.
P. ¿En qué tiene que cambiar también el sector?
R. El sector pesquero se ha concienciado de la necesidad de una pesca sostenible, no de pescar lo máximo posible a cualquier precio. Y tenemos dos buenos ejemplos: los cerqueros que capturan sardina en el Mediterráneo decidieron hace algunos años pescar menos del tope permitido, que era de 500 cajas al día por barco con un precio que rondaba en ese momento las mil pesetas. Cuando bajaron a 300 cajas diarias por barco, lograron elevar el precio en primera venta hasta casi 30 euros. Consiguieron mejorar el stock y rentabilizar mejor las capturas. En Vigo ha pasado lo mismo con la pesca de gallo.
P. Es decir, se acabó el pescado barato.
R. La cadena comercial puede asumir parte del coste que supondría subir el precio en origen. Y en cualquier caso, ofrecemos un producto, en general, muy bueno y beneficioso para la salud. Pagar algo más no debería extrañar a nadie.
P. ¿Con los actos de protesta cree que la sociedad comprende los problemas de sector?
R. Francamente no lo sé. Hemos hecho el esfuerzo de informar sobre lo bueno de nuestros productos, sobre la diferencia de lo que cobramos por un kilo de pescado y lo que paga el consumidor final.
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