Donadoni se 'romaniza'
Ante las bajas de Pirlo y Gattuso, el técnico contempla la posibilidad de que jueguen Perrotta, De Rossi y Aquilani, del Roma
Italia se entrenó ayer en un campito cercano a Viena, en un ambiente de dispersión y calor. Por ahí se veía a Cassano, sentado sobre un balón, y cortándose las uñas. No había mucho más interesante que hacer, mientras sus compañeros jugaban partidillos y el seleccionador, Roberto Donadoni, se exhibía en actitud reflexiva, tal vez pensando lo impensable.
Italia está dividida, y el encargado de armonizar la composición tiene dudas. Ante la indecisión que le embargaba, Donadoni optó por empezar la Eurocopa del modo más conservador posible: mucho Milan y un poco de Juventus. Frente a Holanda, el técnico formó con Ambrosini, Pirlo y Gattuso, añadiendo un toque juventino al colocar a Camoranesi en la derecha. El fracaso fue total y Holanda se exhibió (3-0). Sólo entonces, el seleccionador se decidió a darle la titularidad al mejor medio centro del fútbol italiano: Daniele de Rossi. Desde entonces, el equipo atraviesa un lento y dubitativo proceso de romanización.
Pirlo, uno de los mejores de su selección |
España, en la Eurocopa |
Italia, en Austria y Suiza |
En la selección italiana predominan los jugadores de clubes norteños. Pero incluso estos están reconociendo que ha llegado la hora de introducir cambios. Fabio Cannavaro, de extracción juventina, no jugará contra España, pero su palabra tiene peso. Ayer salió a defender la validez del medio centro del Roma: "La gente piensa que De Rossi es un jugador que lucha y roba muchos balones, pero es mucho más. Tiene una muy buena técnica y le pega al balón con las dos piernas".
La sanción a Pirlo obligará a Donadoni a jugar con De Rossi como medio centro, no como auxiliar del cerebro milanista. La incógnita por desvelar en la concentración de Oberwaltersdorf es si el seleccionador insistirá con la titularidad de Perrotta como media punta, y, sobre todo, si dará entrada a Aquilani. Los tres son el corazón del medio campo del Roma.
Su trayectoria confirma que se trata de jugadores con experiencia en asuntos españoles. Juntos desmantelaron al Madrid en el Bernabéu, en los octavos de final de la Liga de Campeones, en marzo. Si en 2001 el que se llevó la victoria del Bernabéu fue De Rossi, el protagonista de 2008 fue Aquilani. Sus llegadas al área, conduciendo el balón con velocidad y clase, recordaron al primer Kaká.
De Rossi y Aquilani tienen 23 años, pero la hinchada italiana no tiene dudas sobre su destino. Están llamados a liderar a Italia durante muchos años y para hacerlo disponen de unas condiciones poco comunes. Hay que remontarse a la prehistoria del calcio para encontrar a dos volantes tan completos. Ambos nacieron en Roma y crecieron en las categorías inferiores, en el Primavera del Roma. Aquilani destacó desde el principio como el más habilidoso, pero el cuerpo de De Rossi se desarrolló más rápido. Así que éste se convirtió en el lugarteniente de Totti, que lo proclamó su heredero. Aquilani tuvo que foguearse en la Triestina. Su paso por Segunda le consagró como un jugador de carácter, raro en Roma por su capacidad de adaptación a otros ambientes. Nadie duda de que, a falta de Pirlo, Aquilani es el futbolista más preciso para orientar los ataques. Es el arma de Italia, si quiere quitarle el balón a España.
Donadoni lo sabe, pero pondera la conveniencia de apostar abiertamente por el contragolpe. Esta es la tendencia que explicó ayer Ambrosini, otro candidato a cubrir el centro del campo: "España tiene un óptimo proceso de balón. Tocan muy bien en corto e incorporan mucha gente al ataque. Esta es una ventaja y una desventaja. Tienden a desorganizarse. Nosotros tenemos que estar atentos para contragolpear".
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