Vida y obra de Rodoreda en tres nuevas rutas literarias

La infancia, la mujer, la guerra o las palomas: el universo literario de Mercè Rodoreda se nutre de sus experiencias más íntimas y del pedazo de historia que le tocó vivir. Por eso, el Año Rodoreda ofrece desde el pasado fin de semana tres rutas literarias que recorren los lugares donde vivió la escritora y los escenarios barceloneses de sus novelas más conocidas. "Las rutas se dirigen a los lectores de Rodoreda, pero también a todo el que tenga curiosidad por conocer la cultura, historia y tradición literaria catalana", explica el director de la Institució de les Lletres Catalanes y miembro de la Comisión Ejecutiva del Año Rodoreda, Oriol Izquierdo.

La escritora se crió en el seno de una família catalanista que hacía ondear las cuatro barras el domingo, había levantado un monumento al poeta "Sant Jacint Verdaguer" y convirtió la lectura de Joan Maragall en un ritual sagrado de la sobremesa. La infancia fue la etapa que más marcó su producción y la piedra con la que esculpió los símbolos de su obra. El itinerario biográfico por el barrio de Sant Gervasi recorre los lugares donde la pequeña Mercè nació, jugó y se educó y transcurre como un viacrucis literario en cuyas paradas se leen y se interpretan algunos textos de la autora.

Lugares de Gràcia

Para adentrarse en su novela más universal, La plaça del Diamant, un itinerario más histórico discurre por las calles y plazas de Gràcia. La ruta pasa por refugios antiaéreos y otros escenarios de la Guerra Civil y reivindica la literatura de Rodoreda como un formidable testimonio de esta tragedia colectiva.

Ciutat Vella es el marco de una tercera ruta que visita lugares claves de la Barcelona literaria como el Ateneo Barcelonés. Además, repasa las etapas creativas de la autora y símbolos de su obra. Los itinerarios se realizan cada sábado y domingo a las 16.00 y permiten redescubrir la ciudad al ritmo de un paseo de dos horas.Aunque las obras de Mercè Rodoreda describen una Barcelona que ya casi ha desaparecido, "su obra es actual porque habla de la dificultad de vivir", concluye Izquierdo.