_
_
_
_
PRIMER AVISO | La lidia | Feria de San Isidro
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

El ganado

En otros tiempos -hace un huevo, por decirlo de alguna manera- salían de los toriles aquí y allá Gary Cooper, James Stewart y Henry Fonda -para que se me entienda-, que acudían de lejos, humillaban, hacían el avión y, durante el trayecto, aspiraban -como si fuera esencia de perfumería- los vuelos del engaño. Paraban, templaban y mandaban. También se encampanaban en los medios de aquí y de allí Kirk Douglas -casi de verdad- o Anthony Quinn -haciendo como que-.

Al tiempo que Richard Widmark y James Cagney, justitos de casta, pero con nobleza suficiente -aunque fuera robada a última hora- insistían enrabietados ante cualquier trapo.

Ya no es así. Con un canto en los dientes tendríamos que darnos si saliera al ruedo Cary Grant. No habría épica. Pero habría unas maneras impecables, talento, medida. O un torito Fred Astaire. O Gene Kelly, si se le quiere más cuajao. Nadie entre el público, pocos, exigen toros y menos que nadie las figuras, que lo que quieren sobre todas las cosas es figurar.

La mayoría de los toreros, la mayoría mayor, salen gazapones. No se entregan. Se caen. Se defienden en tablas. No encuentran el ganado que va a su arte -aunque lo imponen ellos-. Y, ¿entonces? Bueno, no se trata de engañar a nadie, yo tampoco soy John Ford, los toreros van muy guapos vestidos de luces, eso hay que reconocerlo, da gusto verlos. Y es que, además, corren tiempos duros y malos. Lo mejor es padrear.

José Luis Cuerda es director de cine.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_