AENA zanja el debate sobre Hondarribia al adjudicar la reducción de su pista

La reducción de la pista del aeropuerto de Hondarribia será una realidad dentro de un año aproximadamente. Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA, el ente gestor de los aeródromos) acaba de adjudicar a la empresa Comsa las obras para delimitar las franjas de seguridad (150 metros en cada extremo de la pista). Ya sólo falta que esta compañía ejecute los trabajos, lo que en la práctica supondrá restarle 300 metros de longitud a la plataforma de vuelos hasta dejarla con una distancia efectiva de 1.454 metros para los aviones.

La decisión ha causado un profundo malestar en Guipúzcoa

La decisión del ente adscrito al Ministerio de Fomento cierra definitivamente la puerta a cualquier otra opción que no suponga acortar la pista del aeropuerto. Al mismo tiempo, agrava la polémica abierta con las instituciones vascas -el Gobierno y la Diputación guipuzcoana, principalmente-, que han reclamado la paralización del Plan Director vigente, aprobado en julio de 2006 y que incluye recortar la pista en 300 metros para cumplir la normativa de seguridad de Aviación Civil.

Después de casi siete años de debates -el PP aprobó el primer plan director en el verano de 2001-, AENA contrató el pasado jueves por un total de 791.657 euros el "relleno y nivelación de la franja de la pista y el desplazamiento de los umbrales" del aeropuerto guipuzcoano. La oferta de Comsa fue la más barata de las tres presentadas al concurso. Con una rebaja del 15% sobre el precio de licitación (932.349 euros), la constructora se compromete a acabar las obras en un plazo máximo de diez meses.

La adjudicación ha causado un profundo malestar en la Diputación guipuzcoana, que en los últimos años ha defendido ampliar en 300 metros la pista para "garantizar la viabilidad" de esta infraestructura. La diputada de Movilidad y Ordenación del Territorio, Arantza Tapia, acusó ayer a Fomento de condenar al aeródromo a "una muerte lenta" y desoír los acuerdos adoptados en la sociedad Ortzibia -integrada por el Gobierno autónomo, la Diputación, la Cámara de Comercio y los ayuntamientos de San Sebastián, Irún y Hondarribia- para no acortar el campo de vuelo.

Tapia recordó que las instituciones representadas en Ortzibia acordaron por unanimidad en febrero pasado solicitar al ministerio la paralización del proceso de reducción de la pista mientras se siguen estudiando otras fórmulas. La Diputación llegó incluso a pedir una moratoria hasta 2014 en la aplicación de la normativa de seguridad y mantener hasta esa fecha las instalaciones sin los márgenes de seguridad.

Ortzibia mostró a través de un comunicado su "total rechazo" a la medida adoptada por AENA y le exigió paralizar el proceso de acortamiento de la pista y redactar un nuevo proyecto que "asegure la operatividad y viabilidad futura del aeropuerto".

La decisión de Fomento de seguir adelante con el cumplimiento del Plan Director se basa en la falta de un acuerdo definitivo entre las instituciones vascas sobre las dimensiones del campo de vuelo. Los consistorios de Hondarribia e Irún, los más afectados por esta infraestructura, se han mostrado contrarios a ampliar la plataforma de vuelo en 300 metros, como reclaman el Ejecutivo vasco y la Diputación, hasta estudiar en detalle las afecciones que tendría en sus municipios.

A comienzos de este mes el PP y el PNV presentaron por separado sendas proposiciones no de ley en el Congreso para que Fomento reconsidere su plan de remodelación.