La Junta acuerda con Trabajo recolocar parados de la construcción en otros sectores

El Plan de Medidas Especiales de la Construcción de Andalucía (MECA) que la Consejería de Empleo ha entregado al Ministerio de Trabajo para "amortiguar" el aumento del paro en este sector incluye como primera medida recolocar obreros desempleados en otras actividades que demandan más mano de obra especializada. El ministro del ramo, Celestino Corbacho, ha garantizado al consejero de Empleo, Antonio Fernández, que el Gobierno central subvencionará los cursos de formación necesarios para reconvertir esta nueva bolsa de desempleados a otras ocupaciones en auge, como las navales -tuberos y soldadores-, energéticas y de la automoción. "Es una medida imprescindible a cortísimo plazo que el ejecutivo nacional ve con buenos ojos", afirmó ayer Fernández.

El parón del sector de la construcción se nota mes tras mes en las listas de desocupados del Servicio Andaluz de Empleo (SAE). Para combatir esta tendencia negativa, la Conferencia Sectorial de Empleo que el Ministerio de Trabajo celebrará el próximo mes de junio con las comunidades autónomas aprobará un conjunto de medidas propuestas por la Junta de Andalucía, como cursos de reciclaje laboral de unas 300 horas de duración. "Se trata de aprovechar las habilidades profesionales de los trabajadores de la construcción y adaptarlos a otros sectores productivos emergentes que necesitan de mano de obra cualificada", detalló el consejero, quien ha aportado al ministerio un estudio pormenorizado sobre las profesiones que más mano de obra demandan en las ocho provincias andaluzas.

Según las previsiones del Gobierno central, 2008 se cerrará con unos 63.000 desempleados en el sector andaluz de la construcción, previsiones que la patronal del sector eleva a un total de 75.000. Por su parte, el plan de choque de la Junta, contempla movilizar en cuatro años una inversión de 11.000 millones de euros y una inversión directa de 2.500 millones. En el presente ejercicio la Junta ya ha licitado suelo para la construcción de 8.000 viviendas protegidas de un total de 14.000 previstas para 2008, que movilizarán casi 900 millones de euros de inversión. La apuesta del Ejecutivo andaluz es que esta iniciativa genere 15.000 empleos directos.

La Junta tiene además previsto lanzar un paquete de medidas económicas y fiscales que aprobará mediante decretos el próximo 3 de junio.