La debilidad de Crédit Agricole congela su asalto a Bankinter

Crédit Agricole se salvó de las pérdidas en el cierre de 2007 y logró beneficios de 4.044 millones, con sólo una caída del 16%. Pero ha pinchado en el primer trimestre. Como en otros casos, la causa de la hemorragia ha sido la banca de inversión, su filial Calyon, afectada por la crisis subprime de Estados Unidos.

La entidad francesa, el tercer mayor banco de Francia por capitalización y el primero por volumen de activos, anunció ayer que congela "cualquier gran adquisición" tras ganar un 66,4% menos en el primer trimestre, hasta 892 millones, y ampliar capital en 5.900 millones. Esta decisión supone tirar la toalla, al menos de momento, por Bankinter, el quinto banco español, del que controla el 20,1% del capital. El Banco de España le concedió hasta el 31 de mayo para llegar al 29,99%.

La noticia ha supuesto un evidente alivio para la dirección del banco. No hay que olvidar que Pedro Guerrero, presidente de Bankinter, advirtió a los franceses de que no quería que se sentaran en el consejo, pese a ser los primeros accionistas, por considerarlos competidores. Además, la nueva posición de Crédit Agricole supone un balón de oxígeno para Jaime Botín, que tiene hasta febrero de 2009 para pasar del 16,3% al 24,99% de Bankinter. La cuestión es si el banco francés mantendrá este paquete o lo venderá. El problema es que arrastra pérdidas de más de 200 millones en esta inversión.

Crédit Agricole recortó sus beneficios hasta 892 millones tras provisionar 1.205 millones de Calyon, su filial de banca de inversión, informa Europa Press. El grupo anunció un plan de desinversiones de hasta 5.000 millones en 18 meses "dependiendo de las oportunidades del mercado". Además, el grupo confirmó la ampliación de capital de 5.900 millones para elevar el ratio de capital Tier 1 hasta el 8,5%. El consejero delegado de Calyon, Marc Litzler, ha dimitido y Patrick Valroff ocupará su puesto.