El escolar con signos de asfixia jugaba a aguantar la respiración

Una absurda competición entre compañeros de clase para determinar cuál de ellos resiste más tiempo sin respirar. Ése es, presuntamente, el origen de un incidente que ha acabado con un niño de nueve años ingresado en el hospital. El menor fue hallado el jueves por la tarde -pocos minutos antes de salir de clase- tendido en el suelo de un lavabo del Centre d'Estudis Mireia, en Montgat (Maresme). Estaba inconsciente y tenía una toalla alrededor del cuello. El niño estaba solo, informaron fuentes de la investigación. Al parecer, se entrenaba para poder demostrar a sus amigos que él podía aguantar más.

Los médicos que atendieron al menor en la puerta del colegio decidieron intubarlo y trasladarlo al hospital de Vall d'Hebron, donde ingresó con "asfixia aguda", según un parte médico difundido ayer por el hospital. Ayer el niño recobró la conciencia y comenzó a respirar con normalidad. Se encuentra estable y evoluciona de forma "muy favorable", por lo que es probable que abandone la unidad de cuidados intensivos "en menos de 24 horas", según el parte.

Silencio en el colegio

Los Mossos d'Esquadra han tomado ya declaración a los profesores y alumnos del centro concertado. Algunos testigos reconocen que los escolares se habían retado en otras ocasiones para practicar un juego un tanto irracional, como es aguantar la respiración. Pero hay otras hipótesis. Una de ellas apunta que la víctima trató de mantenerse sosteniéndose con el cuello en un toallero y sin tocar el suelo con los pies.

Los responsables del Centre d'Estudis Mireia, situado junto a la riera de Montgat, rechazaron ayer hacer declaraciones sobre lo ocurrido. "Tenemos órdenes de no hablar", dijo una de las recepcionistas, vestida con una bata blanca impoluta, igual que el resto de los profesores.

Una vecina que vive en el bloque de pisos junto a la escuela explicó que el suceso se produjo a las 17.00 horas. "La madre del niño dejó el coche a toda prisa en la rotonda y salió muy preocupada, porque no sabía qué le había ocurrido", explicó.