Puntualización de Tomás Segovia

Antes que nada, quiero felicitarle por el artículo publicado en las páginas de Cultura a propósito de las cartas de Octavio Paz a mí. Me parece un modelo de buen periodismo, un texto que, frente a un tema más bien complejo, da al lector una imagen clara de lo que la publicación de esas cartas significa. Quisiera sin embargo matizar un detalle. Al final del artículo, el periodista dice que Octavio y yo acabamos por romper.

Tiene perfecto derecho a interpretar las últimas cartas del libro como expresión de una ruptura. Pero creo que ésa es una interpretación entre otras posibles. La mía es un poco diferente: yo no siento que Octavio y yo rompiéramos nunca. Con el tiempo se fueron marcando ciertas divergencias, a la vez políticas, estéticas y, si así puede decirse, "filosóficas". Hubo también un alejamiento material, en el sentido de que había cada vez menos encuentros, pero en eso influían también las circunstancias prácticas de las vidas muy diferentes que vivíamos.

La última vez que lo vi, poco antes de su muerte, me dijo que en su obra, que estaba recopilando, faltaba una página, que hubiera podido ser su mejor página, y que se llamaría "Lo que amo y lo que detesto en Tomás Segovia". No me parece una frase que pueda decirse a alguien con quien se ha roto. Un cordial saludo.