Cerrado un club de ajedrez por organizar torneos de póquer

"Esperaban encontrar mesas repletas de dinero y hallaron a un puñado de universitarios echando la partida". Iván García recuerda con amargura la operación policial que el viernes acabó con la clausura de un club de ajedrez donde, de vez en cuando, se organizaban también timbas ilegales de póquer. Una treintena de agentes de los Mossos d'Esquadra irrumpieron por la noche en el local -una planta baja de la Ronda de Sant Antoni de Barcelona- y desmontaron el tinglado.

En Cataluña, sólo se puede jugar al póquer en los casinos. Cualquier otra opción está fuera de la ley. García y los otros fundadores del club lo sabían, pero su afición a lo que ellos consideran un deporte les llevó a organizar una serie de competiciones, a las que dieron el nombre de Eixample Poker Tour. "Es un poco en plan coña. Quien juega paga una cuota y se entrena", insiste el joven.

Los 300 jugadores habían pagado 100 euros por cabeza para inscribirse en la competición. Los policías sorprendieron a 15 en plena partida. Cuatro de ellos, habituales en casinos europeos y americanos. La Operación Texas -por la modalidad de juego, el Texas Hold'em- permitió a los agentes incautarse de 1.700 euros en efectivo, además de miles de fichas, mesas profesionales, juegos de cartas francesas, un ordenador portátil y un proyector.

Los participantes, sin antecedentes por juego ilegal, se enfrentan ahora a una multas de hasta 6.000 euros, y los organizadores, a otra de 600.000 por falta muy grave. Pero García cree que la "espectacular operación" busca sólo "dar un toque de atención" y es optimista sobre el expediente que abrirá la Dirección General de Juego y Espectáculos.