Clases particulares de literatura y tardes de amor
Una amante de Norman Mailer vende su historia a Harvard
Además de prolífico y genial novelista, agitador social y periodista, el recientemente fallecido Norman Mailer sentía una profunda debilidad por las mujeres. Sólo quienes realmente sienten pasión por el género opuesto son capaces de casarse seis veces, dar vida a nueve hijos y, además, sazonar su vida en pareja con alguna amante. Un nuevo nombre se ha unido esta semana a la lista de mujeres de la vida de Mailer. Carole Mallory, una actriz de serie B 20 años más joven que él, acaba de vender a la Universidad de Harvard siete cajas de archivos relacionados con el escritor. Nadie sabe la cuantía que Harvard ha pagado por el tesoro que Mallory ha custodiado con mimo durante más de dos décadas pero no ha debido de ser calderilla: la Universidad de Tejas le pagó al propio Mailer 1,3 millones de euros por sus archivos personales.
¿Qué custodiaba la hasta ahora desconocida amante de Mailer? Según informaban esta semana diversos medios estadounidenses, la actriz y modelo mantuvo una relación permanente con el escritor desde 1983 a 1992, coincidiendo con el matrimonio que Mailer mantenía con Norris Church. Una vez por semana el escritor acudía a visitarla, le daba clases de narrativa, almorzaban, pasaban la tarde haciendo el amor y después se despedían hasta la semana siguiente. "Yo quería que él me enseñara a ser escritora. Era uno de los mejores novelistas de Estados Unidos", ha declarado ella a la agencia Associated Press.
A lo largo de esos casi 10 años, Mallory conservó cada una de las correcciones que le hizo Mailer a sus trabajos literarios y comenzó a escribir un libro de memorias, que ahora está en manos de Harvard, en el que hay explícitos detalles sobre sus encuentros sexuales, incluidas escenas de hasta 50 páginas basadas en sus relaciones de cama. Los archivos adquiridos por Harvard incluyen además fotografías, transcripciones de entrevistas con el escritor y borradores de algunas de las lecciones de literatura dadas por el autor de La canción del verdugo o Un sueño americano. "Era importante tener a Mailer en nuestra colección", ha declarado Beth Brainard, portavoz de la institución en la que se graduó el escritor. Y aunque lo que haya despertado la atención de la prensa sea el morbo sobre la vida sexual del escritor, según Leslie Morris, responsable de libros y manuscritos en Harvard, "lo que a nosotros nos interesa no es eso si no cómo escribe un escritor", ha declarado en el diario universitario The Crimson.
Mallory asegura haber esperado a vender sus archivos hasta la desaparición del escritor "por respeto a la familia", aunque no le ha importado mucho que la viuda de Mailer aún esté viva.
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