Diversidad y libertad familiar

En una improvisada pero inmaculada "salita de estar" montada debajo de los soportales del Palacio de María Pita, desfilaron ayer todo tipo de familias coruñesas para posar en una sesión fotográfica que retrataba la diversidad de la ciudad y también la libertad de cada uno para organizar su vida. Con esta original iniciativa, que se plasmará en una exposición, arrancó ayer la celebración del 25º aniversario del primer Centro de Orientación Familiar de A Coruña, creado por el Ayuntamiento y luego integrado en el sistema público de salud.

Hasta tres generaciones de rastas, grupos de inmigrantes africanos que conviven en la ciudad, familias gitanas de Penamoa, padres o madres solteras y parejas heterosexuales u homosexuales de todas las edades y orígenes acudieron a la festiva sesión fotográfica, a la que también se sumaron, de improviso, novios que acababan de casarse en el ayuntamiento.

En medio de un ambiente festivo amenizado por una charanga y un grupo de teatro, también se repartieron folletos informativos sobre el importante papel de los equipos de Planificación Familiar (hay 13 en Galicia). Son los centros, ahora integrados en el Sergas, que se ocupan de las consultas sobre anticonceptivos, aborto, esterilidad, donación de óvulos y todas las dudas o problemas sexuales o de pareja. Avances hubo, y muchos en este cuarto de siglo, pero aún queda camino por recorrer. El retraso con otros países europeos es de 50 años, asegura Xosé Vidal, director del COF de A Coruña.