"El Gobierno llegó al borde del precipicio en el proceso con ETA"
"ETA dejó la tregua porque creyó que era una rendición a bajo coste" - "Ejecutivo, partidos y sociedad han quedado escarmentados"
El presidente del PSE, Jesús Eguiguren, fue la pieza clave de las conversaciones con ETA. Tras un largo silencio, Eguiguren ha decidido relatar en una entrevista a EL PAÍS el proceso que vivió en primera persona. "El Gobierno llegó al borde del precipicio para intentar salvar el proceso, a riesgo de su propio desgaste.
El presidente del PSE, Jesús Eguiguren, fue la pieza clave de las conversaciones con ETA. Tras un largo silencio, Eguiguren ha decidido relatar en una entrevista a EL PAÍS el proceso que vivió en primera persona. "El Gobierno llegó al borde del precipicio para intentar salvar el proceso, a riesgo de su propio desgaste. El Ejecutivo quiso convencerse de que había hecho todo lo que podía para acabar con el terrorismo (...) incluso después del final", explica Eguiguren, quien el 8 de marzo llevó a hombros el féretro del ex edil socialista Isaías Carrasco, asesinado por ETA. "El proceso se hizo para no llevar más féretros". Para este negociador, ETA sintió "vértigo de abandonar las armas al poco de decretar la tregua" porque creyó que era "una rendición a un coste muy bajo para el Gobierno". "Pero mostramos al mundo abertzale que si ETA dejaba las armas los partidos decidirían el futuro del País Vasco. Algunos piensan que fuimos ingenuos. Yo creo que intentamos un logro histórico". Para Eguiguren, "Gobierno, sociedad y partidos han quedado escarmentados".
