El auto le impide estar a menos de 500 metros de un aeropuerto

En la nueva vida de Juan Antonio Roca, el avión como método de transporte queda descartado. Para evitar el temido riesgo de fuga, el juez ha prohibido al principal imputado del caso Malaya que se acerque a menos de 500 metros de ningún aeropuerto público ni privado. De viajar en ferry -en Málaga hay múltiples conexiones a Marruecos- o trenes de alta velocidad no se precisa nada. Cada vez que pretenda viajar, el ex asesor de Urbanismo tendrá que estudiar concienzudamente los medios de los que dispone. No podrá salir de España, ya que le retirarán el pasaporte y tendrá que acudir al juzgado una vez al día.

Antes de su detención, el ex asesor de Urbanismo tenía a su disposición un avión privado cuyo uso, el juez Óscar Pérez cedió en diciembre a la Policía.

La avioneta, una Cessna Citation II 550 valorada en 1,2 millones, se considera "uno de los mejores jet de negocios VIP", aunque ahora se utiliza en misiones humanitarias y de auxilio a ciudadanos. Entre las posesiones intervenidas a Roca también hay helicópteros, que tampoco podrá frecuentar, y barcos, sobre los que el magistrado no se ha pronunciado.

Una vez que sus abogados hagan efectivo el millón de euros que el magistrado le ha impuesto como fianza, la máxima hasta ahora, Roca deberá desplazarse "de forma inmediata" al juzgado número 5 de Marbella, o al que esté de guardia si queda en libertad fuera del horario laboral.

Allí debe aportar su domicilio, y notificar cualquier cambio de residencia. "Para poder comparecer en otro juzgado distinto deberá solicitar a este instructor autorización con la antelación suficiente para proveer", señala el juez. Como ha ocurrido con otros imputados, como la tonadillera Isabel Pantoja, podrá salir del territorio español si tiene autorización judicial.