Tres empresarios vuelven a negar pagos a Roca

Los empresarios Francisco Zambrana, Manuel Lores y el arquitecto Miguel López Benjumea, procesados todos por cohecho en el caso Malaya, ratificaron ayer las declaraciones en las que negaron haber pagado al ex asesor de Urbanismo Juan Antonio Roca, máximo imputado del caso, por conseguir resoluciones administrativas de carácter favorable. Las comparecencias, de apenas cinco minutos de duración, se retrasaron hasta mediodía debido a la ausencia del empresario Eusebio Sierra, que no compareció.

Zambrana, Lores y Benjumea están acusados de pagar sumas que van de los 45.000 a los 60.000 euros por conseguir resoluciones favorables en comisiones de gobierno, como licencias de primera ocupación o de obras.

Según el auto de procesamiento, el arquitecto pagó junto con el empresario José María González de Caldas, 60.000 euros para conseguir la licencia de primera ocupación de la promoción Señorío de Marbella. Sus nombres aparecieron en la minuciosa contabilidad del supuesto cerebro de la trama marbellí.

El juez Óscar Pérez, instructor del caso, ha citado hoy al empresario González de Caldas para el trámite conocido como declaraciones indagatorias, en el que los 86 procesados son informados de los hechos que les imputan y se les ofrece la posibilidad de añadir nuevas manifestaciones. Junto a él comparecerán los promotores José María Enríquez y Giovanni Piero Montalvo, también imputados por cohecho, y Carlos García Puente, procesado por blanqueo y alzamiento de bienes.

Las comparecencias ante el juez comenzaron el pasado 18 de febrero. Hasta ahora han prestado declaración más de una treintena de procesados, entre los que se encuentra la ex alcaldesa Marisol Yagüe o la esposa de Juan Antonio Roca, María Rosa Jimeno. Ninguna de ellas aceptó a responder nuevas preguntas. Jimeno acudió el jueves por su procesamiento por blanqueo de capitales derivado de la supuesta compra de billetes de lotería premiados para regularizar fondos ilícitos. El mismo día, el empresario Fidel San Román, uno de los máximos accionistas de la Plaza de Toros Las Ventas e imputado por cohecho, ratificó en sus declaraciones, en las que reconoció haber hecho pagos a Roca "para poder construir más viviendas de las que aparecían reflejadas en el Plan General de 1986", pero tampoco quiso responder a nuevas preguntas, señalaron fuentes de las defensas.