_
_
_
_
ELECCIONES 2008 | Campaña electoral

Las urnas deciden el liderazgo político en Galicia a un año de las autonómicas

PP, PSdeG y BNG se disputan 23 escaños en el Congreso de los Diputados

Todos pendientes de lo que ocurra en Madrid, pero con la vista puesta en el resultado en Galicia. Emilio Pérez Touriño, Alberto Núñez Feijóo y Anxo Quintana tendrán hoy la vista puesta en el desenlace del duelo protagonizado por José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy pero también en su particular enfrentamiento. Ese duelo debe decidir si el PP conserva el liderazgo político en Galicia o si cede el testigo al PSdeG, a un año aproximadamente de las elecciones autonómicas que examinarán la gestión del bipartito.

El partido de Alberto Núñez Feijóo ha hecho de la victoria en votos y en escaños su principal objetivo, hasta el punto de dar por bueno el resultado si su apoyo popular supera al de los socialistas y conservan los 12 escaños que lograron en 2004. Todo lo que esté por encima de eso será una agradable sorpresa para los herederos de Manuel Fraga, empeñados como están en demostrar la solidez de su alternativa política.

Más información
El PSOE pisa los talones al PP

Los socialistas lo tienen, en principio, más difícil. Con Emilio Pérez Touriño en la Presidencia de la Xunta y después de conseguir las alcaldías de seis ciudades y de los municipios más poblados, el PSdeG se puso como objetivo un vuelco histórico en estas elecciones: ganar al PP en votos y en escaños. Las cuentas de los socialistas gallegos pasan por sumar un escaño más en Ourense y, sobre todo, por conseguir que la pérdida de representación de la provincia de A Coruña (pasa de 9 a 8 diputados) perjudique al PP. Si lo consiguen, tendrán 12 representantes en el Congreso y sus adversarios sólo 11. Claro que, para hacer realidad ese sueño, primero necesitan recortar los casi 10 puntos porcentuales de ventaja que les sacó el PP hace cuatro años, cuando los populares se impusieron en las generales en Galicia con el 47,1% de los votos. Un objetivo que, a la luz de las encuestas, parece muy difícil de conseguir.

Las expectativas del BNG son bien diferentes. La organización liderada por Anxo Quintana asume que las elecciones generales son el escenario menos favorable para el nacionalismo y por eso da por bueno un resultado que le permita conservar los dos escaños que consiguió en 2004 (uno por A Coruña y el otro por Pontevedra). El verdadero listón del éxito o el fracaso para el Bloque es el porcentaje del 11,4% que obtuvo hace cuatro años. Para los nacionalistas superar esa cifra significaría poner fin a la sangría de votos que sufren desde hace cuatro años y que les ha hecho retroceder en porcentaje de apoyo popular en todas las convocatorias celebradas desde 2001 (gallegas, generales, europeas y municipales).

A un año de las autonómicas, estas dos variables (porcentaje de apoyo y escaños) y el resultado de las elecciones en el conjunto de España son decisivas. Las primeras serán utilizadas para juzgar la labor del bipartito durante los tres primeros años de legislatura. La segunda, de la que depende que el Gobierno central siga en manos del PSOE o vuelva a las del PP, definirá el territorio a partir del cual los tres partidos gallegos con representación parlamentaria construirán su estrategia de aquí a que Emilio Pérez Touriño disuelva el Parlamento y convoque elecciones.

Con todo, y aunque el recuento de los votos comenzará esta noche, la votación no habrá finalizado hasta el próximo miércoles. Falta el voto de la emigración, que en caso de un recuento apretado y como ya es costumbre en Galicia, puede acabar siendo determinante. Si se da esa circunstancia habrá que esperar al miércoles. Ese día los presidentes de las juntas electorales provinciales introducirán en una urna los sobres de votación recibidos hasta ese día. Acto seguido, se escrutarán esos votos y se incorporará el resultado al cómputo del domingo.

El peso del exterior

El Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA), que es como se denomina oficialmente la lista de españoles que viven en el extranjero y tienen derecho a voto, suma en Galicia 326.223 personas (un 5,5% más que hace cuatro años). La mayoría de ellos están censados en las provincias de A Coruña (115.423) y Pontevedra (96.312), en las que representan el 10,8% y el 11,08% del conjunto de los electores. Su importancia relativa, sin embargo, es mucho mayor en Lugo (son 42.241 residentes en el extranjero; un 12,1% del total provincial) y, sobre todo, en Ourense. Los 72.248 emigrantes censados por esta provincia pesan un 20,3% en el censo de la circunscripción.

El peso real de la emigración en las votaciones, sin embargo, no es tan importante. Tradicionalmente, los residentes ausentes que tramitan su voto por correo no pasan del 30%. De repetirse este comportamiento, los votos de los emigrantes gallegos que el miércoles se sumarán los de los residentes del interior estarán en una horquilla situada entre los 76.000 y 100.000 sufragios.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_