La Comunidad ignoró denuncias de familiares de la residencia Goya
La Consejería de Familia y Asuntos Sociales ha ignorado en el último año varias denuncias presentadas por familiares de residentes de la residencia Goya, en la que, según el libro de incidencias del centro, varias personas mayores han despertado días "llorando amargamente porque estaba llena de orina hasta el cuello" o "en condiciones higiénicas lamentables". Las hojas publicadas corresponden a los días que van del 1 al 20 de enero de 2007, las únicas que se han hecho públicas hasta la fecha.
En mayo de 2007, seis familias mostraron su "malestar e indignación ante la mala elaboración de las comidas e incluso la escasez de las mismas". Meses más tarde, el 25 de agosto y el 10 de septiembre, la familia de otra residente presentó sendas denuncias en la que se alertaba de la "alarmante falta de personal". "En la actualidad sólo hay dos auxiliares por la tarde, por lo que resulta imposible asear a los residentes", puede leerse en la denuncia. La respuesta de la dirección a estas denuncias fue una larga carta en la que se defiende el cumplimiento de la normativa en el centro, aunque sin dar respuestas concretas a las quejas por la falta de higiene, de personal o la pérdida de ropa.
La publicación de las hojas del libro de incidencias levantó ayer airadas reacciones. El PSOE exigió la dimisión de la consejera de Familia, Gador Ongil, ante la "oleada de escándalos" que sacuden a los centros de mayores públicos, mientras el vicepresidente primero de la Comunidad, Ignacio González, defendió que la Comunidad ha efectuado "tres inspecciones" en la residencia.
La polémica creó división en el comité de empresa del centro. La mayoría de CC OO aprobó un comunicado mostrando su rechazo a la publicación de la noticia, a la que acusó de crear una "alarma desmedida e injustificada". El comunicado atribuye el caso a "un exceso verbal al reflejar una incidencia habitual en la atención, como es un escape de orina de un pañal". La minoría de UGT, en cambio, rechazó suscribir la nota. Su dirección regional, además, exigió a la Comunidad que "asuma sus responsabilidades" ante las "graves irregularidades" registradas.
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