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Las horas perdidas han crecido un 34% desde 1998

Pedro Gorospe

La patronal alavesa estima que las horas no trabajadas en el conjunto de los sectores productivos de la provincia han aumentado un 34% desde 1998, cifrándose en 2,5 millones las horas perdidas sólo en el último año. Según sus estudios, los costes asociados a ese absentismo superan los 55 millones de euros. Un precio muy alto cuando además cerca de un 60% de las jornadas de trabajo perdidas por esta causa se deben a enfermedades y accidentes "no laborales", añade el SEA.

"Necesitamos un cambio de actitud de los trabajadores, que asuman su responsabilidad en el proceso productivo", ha dicho el presidente de la patronal provincial, Juan José Azurmendi. La petición que hizo para abordar de manera conjunta una reflexión sobre el absentismo ya tiene su propio marco, si se firma el convenio.

Con todo, las centrales van a condicionar esa firma a que la patronal garantice que sólo se beneficiarán del mismo quienes se adhieran. UGT y CCOO quieren que, puesto que se va a tratar de un convenio de eficacia limitada, como fue el de 2003, y larga duración (cuatro años) no se convierta al final en un texto de aplicación general, sino que, como dicta la ley, sólo se beneficien de sus condiciones los trabajadores que lo suscriban.

De los 165.000 trabajadores del Metal en Euskadi, casi un 44% están empleados en pequeñas y medianas empresas de hasta 50 personas en plantilla. Es el mayor colectivo del sector y el más vulnerable a la carencia de regulación provincial. Álava y Vizcaya están sin convenio desde 2003. Guipúzcoa lo firmó en 2006 y ha renovado este año con apoyo de LAB. Esas diferencias han hecho que los salarios sean hasta un 43% más bajos en Álava y Vizcaya que en Guipúzcoa.

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Sobre la firma

Pedro Gorospe
Corresponsal en el País Vasco cubre la actualidad política, social y económica. Licenciado en Ciencias de la Información por la UPV-EHU, perteneció a las redacciones de la nueva Gaceta del Norte, Deia, Gaur Express y como productor la televisión pública vasca EITB antes de llegar a EL PAÍS. Es autor del libro El inconformismo de Koldo Saratxaga.

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