Erro: "Pese a su formación, las mujeres siguen lejos de puestos directivos"

La Defensora de la Igualdad, Maite Erro, formalizó ayer su colaboración con la Universidad del País Vasco (UPV) firmando un acuerdo con su rector, Juan Ignacio Pérez, que permitirá crear un observatorio de la igualdad en el entorno laboral. En declaraciones a EL PAÍS, Erro criticó la brecha que supone que las mujeres, "más preparadas que nunca", sigan sin ascender a puestos de dirección de empresas e instituciones y a las cátedras universitarias.

El observatorio, cuyo diseño finalizó en 2007 el Departamento de Economía Aplicada de la UPV, recopilará datos estadísticos sobre la realidad laboral, comparando la vasca con la de otras comunidades y países, y el sector privado con el público. Este año, se pondrá en marcha, en colaboración con el Eustat, un apartado dentro de la web de la Defensoría, aún en construcción, que ofrecerá "datos de contratos y salarios sobre los que ir interviniendo". Erro se mostró especialmente preocupada por las trabas para conciliar la vida laboral y la personal. El proyecto ha tomado como referencia iniciativas similares consolidadas en los países nórdicos.

Citando otro estudio encargado a la UPV para analizar los beneficios que reporta la presencia de mujeres en puestos de gestión y dirección, la defensora lamentó que "las mujeres más preparadas -son mayoría en la universidad y acceden a másters y doctorados- siguen sin llegar a puestos directivos". "Supone un desaprovechamiento de recursos humanos que no nos podemos permitir", recalcó.

Voluntad de avanzar

Entre otros informes desarrollados con investigadores de la universidad, destacó uno sobre legislación antidiscriminatoria y otro que analiza todos los convenios colectivos sectoriales de Euskadi. "El acuerdo no es una mera declaración de intenciones: formaliza una colaboración que ya existe. La Defensoría se nutre del conocimiento que genera la universidad", subrayó.

Erro, ex profesora de Psicología Social de la UPV, apreció una "importante voluntad de avanzar" en la universidad pública, plasmada en la creación de una Dirección de Igualdad, entre otros gestos. Abundó en que el profesorado que se forma en género contribuirá a que pronto la igualdad sea un elemento transversal en la docencia. "La brecha más importante es la escasez de mujeres catedráticas", lamentó.

El acuerdo también incluye la elaboración de un estudio sobre la relevancia social de las sociedades gastronómicas y un seminario sobre discriminación y procedimiento jurídico en los próximos cursos de verano.