_
_
_
_
_
Un día para la ilusión infantil

La ilusión no cambia

Hace 13 años, tres redactores de este periódico suplantaron por unas horas a los Reyes Magos en El Corte Inglés de la calle de Goya. Ha pasado tiempo, pero los chavales de entonces pedían regalos similares a los de ahora. En 1995 ya comenzaban a triunfar los videojuegos y las consolas. Era de lo que más se pedía. Igual que ahora. La única diferencia con los niños y niñas de 2008 es que éstos tienen una oferta superior de estos productos, con innumerables consolas y títulos de videojuegos.

Otra similitud es la tendencia de ellos a pedir juegos tradicionalmente considerados de niños y ellas, los comúnmente tachados como femeninos. Los primeros piden bicicletas, scalextrics y coches. Las segundas solicitan barbies y nenucos en particular. Hace más de 10 años también era así. María, de 9 años, fue la excepción, al pedir un balón de fútbol. Lo que tampoco cambia es la ilusión que reciben los pequeños desde Oriente.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_